Heroínas, protagonistas en el cine de Jorge Sanjinés

Después de varios años tuve el privilegio de volver a reencontrarme con tres destacadas obras cinematográficas de Jorge Sanjinés gracias a un ciclo organizado por Mujeres Creando: “El coraje del pueblo” (1971), “Las banderas del amanecer” (1985) y “La nación clandestina” (1989) y develar que las mujeres, heroínas anónimas, no sólo son fundamentales en su cinematografía, sino artífices de las luchas sociales.

Estas películas ponen de manifiesto el protagonismo colectivo femenino en tramas que desafían los estereotipos tradicionales; mujeres que no solo sostienen la vida, sino que ocupan las primeras líneas de la lucha poniendo la vida en juego. Son protagonistas exentas del miserabilismo con el que se suele representar a los sectores subalternos, como señala Silvia Rivera.

Las protagonistas de “El Coraje” y “Las Banderas” continúan siendo un referente tanto en el ámbito social como en el subjetivo, gracias a la destreza narrativa de Sanjinés para entrelazar las vidas cotidianas de las mujeres mineras con las luchas sociales que, a pesar de la historia y el tiempo transcurridos, siguen conmoviendo.

El cine de Sanjinés otorga el papel protagónico a las mujeres con sus propias voces y narrativas, desafiando los estereotipos y brindando una auténtica representación de las vivencias femeninas en las minas de Bolivia, resaltando su inmensa dignidad y fortaleza en las luchas reivindicativas.

Estas vidas heroicas, que dejaron una huella imborrable en la historia, pueden personificarse en figuras como la joven y valiente Domitila Chungara, cuyo legado continúa conmoviendo, incluso a pesar de los cambios históricos y el declive de ideales revolucionarios.

Aunque pueda parecer repetitivo, el cine de Sanjinés emerge con las reverberaciones de la Revolución Boliviana de 1952, un período de transformación marcado por la instauración del voto universal, la reforma agraria y la nacionalización de las minas. Su cinematografía se desarrolla en estrecha relación con el pueblo, los mineros, los campesinos y los sectores comprometidos, alejándose del cine comercial y abriendo la ruta del -cine junto al pueblo-.

“El Coraje del Pueblo” se erige como una obra emblemática en la filmografía de Sanjinés, reconstruyendo eventos históricos de los años 60 centrados en la resistencia de las minas contra la explotación, la desigualdad y la represión gubernamental. Esta película rompe con las estructuras convencionales al basarse en testimonios y experiencias de valientes mujeres que participaron activamente en la defensa de sus derechos, que a la luz del tiempo, cobran un valor histórico excepcional.

En “Las Banderas del Amanecer,” Sanjinés profundiza en la solidaridad de clase entre mineros, campesinos y sectores comprometidos. La película presenta una movilización social liderada por mujeres mineras, entrelazando el dolor, la ira y la esperanza, utilizando elementos visuales y narrativos que testimonian otro capítulo emblemático de las luchas reivindicativas. Las mujeres siguen siendo una presencia crucial, reflejando dignidad y fortaleza en medio de las contradicciones sociales y represiones gubernamentales.

La obra de Sanjinés, que trasciende las convenciones, se convierte en un vehículo para la conciencia social y la participación colectiva. A través de la representación de mujeres valientes y el enfoque en la lucha política, su cine continúa siendo un poderoso testimonio que preserva la memoria histórica y que aboga por los cambios sociales.

Además de ser hitos en la historia del cine, las obras de Sanjinés nos invitan a reflexionar sobre nuestra relación con la historia, nos conduce a comprender que nuestro pasado no es solamente un ejercicio de memoria, sino un acto de justicia hacia las mujeres que lucharon por sus reivindicaciones y que fueron artífices extraordinarias en la lucha por el retorno a la democracia y por derechos humanos.

Las películas de Sanjinés son un homenaje a esas heroínas de las minas y del campo inmortalizadas en “El coraje del pueblo,” “Las banderas del amanecer” o en “Juana Azurduy, guerrillera de la Patria Grande.”

El ciclo de cine presentado por Mujeres Creando fue un homenaje a Beatriz Palacios, la compañera de vida de Sanjinés, además de extraordinaria investigadora y cineasta y que diseminó su cinematografía en las minas, en el contexto rural y en pequeñas poblaciones no sólo del país, sino en diversos contexto.  Creo justo también extender el homenaje a esas otras mujeres que también fueron parte de esta cinematografía, como Consuelo Saavedra, compañera de Jorge en sus inicios en el cine y a Danielle Caillet, fotógrafa, documentalista y ocasional actriz.

Homenaje que se extiende también a mujeres que desempeñaron roles fundamentales en la producción del cine del Grupo Ukamau, como Consuelo Lozano, Patricia Suárez y al compromiso excepcional de Mónica Bustillos;  y a todas las mujeres valientes y anónimas que continúan luchando incansablemente por sus derechos, 

Gracias Jorge por seguir conmoviéndonos…

Patricia Flores Palacios es feminista queer y comunicadora social.