Una mentoría es una relación de aprendizaje
y desarrollo entre una persona con experiencia (mentor) y otra con menos
experiencia (aprendiz). El objetivo principal es guiar, aconsejar y brindar
apoyo al aprendiz en su crecimiento personal y profesional.
Las mentorías son especialmente valiosas en áreas como la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), donde el conocimiento y las habilidades evolucionan rápidamente. Un mentor experimentado puede compartir lecciones aprendidas, conectar al aprendiz con oportunidades clave como pasantías, proyectos de investigación, intercambios, además de ayudarlo a navegar desafíos únicos en estas carreras.
Participar en una mentoría beneficia tanto al mentor como al aprendiz. Para el aprendiz, tener un guía con experiencia es invaluable. Pueden aprender de primera mano, recibir retroalimentación honesta y desarrollar habilidades que aceleran su crecimiento. Desde que me involucro con proyectos STEM, constantemente escucho “si alguien me hubiera guiado/aconsejado”, quizás su experiencia estudiando una de estas carreras, hubiera sido más llevadera.
Para el mentor, la mentoría es una oportunidad de dar de vuelta, compartir conocimientos y ayudar a la próxima generación. También pueden aprender nuevas perspectivas del aprendiz y mantener su propia motivación y pasión por el campo que una vez eligió estudiar.
Además, las mentorías pueden ayudar a inspirar a jóvenes mujeres en Bolivia, a considerar una carrera en campos STEM. Al tener modelos femeninos exitosos, las jóvenes bolivianas pueden visualizarse a sí mismas en carreras científicas y tecnológicas. Las mentorías son una herramienta poderosa para empoderar a la próxima generación de líderes STEM en Bolivia.
En Bolivia, donde la investigación científica aún enfrenta desafíos, las mentorías pueden marcar una gran diferencia para jóvenes interesados en carreras STEM. Mediante el trabajo realizado con Chicas Waskiris, descubrimos, que muchas mujeres en secundaria, no siempre se perciben con la misma capacidad que un varón para optar por una carrera STEM.
Influyen varios factores, entre los que destaco la formación incompleta de varios maestros, que no logran estimular de manera adecuada, la enseñanza de materias como matemáticas, química, física y biología. Otro factor que puede llegar a acobardar a las mujeres adolescentes a considerar este tipo de carreras, también puede ser la imposición familiar por una carrera “fácil” o por considerar que mejor apurar el matrimonio más conveniente.
Dentro de poco iniciará el programa gratuito de mentorías Waskiris. Son 80 profesionales o estudiantes avanzadas de distintas carreras STEM, que se hallan motivadas de guiar y apoyar a la aprendiz con la que serán emparejadas. Este programa nace realmente desde el corazón de varias mujeres, al no contar con financiamiento, pero sí con mucho interés de estas mentoras y el equipo que apoya en la logística. La convocatoria cierra hoy 6 de julio.
Durante cuatro sesiones virtuales se planea establecer metas a corto, mediano y largo plazo con las aprendices, que les sirva para tener claro qué deben reforzar, aprender, mejorar y ordenar, en caso de que busquen postular dentro de poco a una carrera universitaria o técnica.
La preferencia por mujeres podría parecer repudiar a los varones. No es el caso, pero se enfoca en mujeres porque al momento de elegir carreras STEM, hemos observado mayor duda y hasta temor por parte de ellas en elegir este tipo de carreras.
Mucho debe seguir cambiando en Bolivia, para que todos puedan tener las mismas oportunidades, varones, mujeres y hasta personas con cierto tipo de discapacidad. Este programa es un aporte entre las muchas necesidades que aún deben de abordarse si queremos que el país realmente pueda desarrollarse en ciencia y tecnología.