Los décimos en cultivos OGM

Para infarto de los activistas y espanto de los que aprueban la contaminación de los ríos con mercurio, pero que siguen sin hallar un sustento científico para oponerse al cultivo de Organismos Genéticamente Modificados (OGM), durante el 2022, Bolivia sigue figurando entre los 10 países con mayor extensión de este tipo de cultivos.

La revisión global del área de cultivos transgénicos realizada en mayo de 2023 por AgBioInvestor, es un análisis exhaustivo de la adopción global de cultivos OGM, incluidas las tendencias, los desafíos y las oportunidades en la industria. El informe también destaca las preocupaciones que aún tienen ciertos sectores de la sociedad, sobre los efectos ambientales y la seguridad alimentaria de los cultivos OGM, por lo que destaca la necesidad de una regulación adecuada para abordar estas preocupaciones. En general, la revisión proporciona una visión completa del estado actual de la industria de los cultivos OGM y sus perspectivas futuras.

En las conclusiones de la revisión se destaca que los cultivos OGM siguen siendo una herramienta importante para mejorar la seguridad alimentaria y reducir la pobreza en muchos países en desarrollo. También se señala que los principales cultivos OGM siguen siendo la soja, el maíz, el algodón y la canola, y que los Estados Unidos, Brasil, Argentina, India y Canadá son los principales países productores de estos cultivos.

Recordemos que la soja es el único cultivo transgénico cultivado en Bolivia. El 2022 la superficie aumentó en 1,1% respecto al año anterior mientras que la adopción se mantuvo en el 99,9% de la superficie total de soja. Cuando se introdujo la soja OGM, el 2008 con una tasa de adopción inicial del 63%, y creció rápidamente a más del 90%.

Pero pasando de las cifras a la relevancia de emplear el uso de la biotecnología de manera amplia en la producción de alimentos y fibras textiles, cabe recordar un par de casos. El año pasado, Bangladesh dio la luz verde para el cultivo de algodón OGM. Bangladesh ocupa el segundo lugar después de China en la exportación de prendas confeccionadas, con ganancias anuales de más de $35 mil millones. Sin embargo, importan la mayor parte de algodón, llegando a pagar hasta $5 mil millones en facturas de importación anualmente.

El algodón Bt será el segundo OGM de Bangladesh después de que introdujo su primero, la berenjena Bt el 2014. Desde que se introdujo la berenjena OGM, su adopción se ha incrementado a poco más del 80%, con 65.000 productores. Así, este pequeño país, va dando prioridad a los cultivos que necesitan y adoptando herramientas de la biotecnología.

Además de haber aumentado en un 7.4% la superficie de cultivo con OGM, Brasil ha decidido cortar su dependencia de otros países para el tema del trigo. Desde hace 40 años invierten en el mejoramiento genético del trigo. EMBRAPA pasó a traer tipos de trigo de otras regiones del mundo, adaptados a altas temperaturas y menor disponibilidad de agua, y a cruzarlos con el material que se tiene en Brasil. Pero no todo es el mejoramiento de semillas.

Para el 2025, Brasil será el mayor o el segundo mayor productor de bioinsumos del mundo. Esto a través de 2 grandes áreas:, los biofertilizantes, que son microorganismos que ayudan a reducir la necesidad de fertilizantes o movilizar fertilizantes, y está la parte de los bioplaguicidas. Esto permite reducir el consumo de plaguicidas químicos.

En 2 años más ¿seremos capaces de regenerar la producción de algodón y ser autosuficientes en trigo? ¿Desarrollaremos una política en biotecnología que permita el desarrollo de bioinsumos y mejores biocombustibles? Mucho me temo que el miedo sustentado en el desconocimiento técnico del tema, nos mantendrá alejados de mejores propuestas para mejorar nuestro sector productivo.

Cecilia González Paredes M.Sc. 

Especialista en Agrobiotecnología