Hijos: una decisión personal; censo: una obligación Estatal

El miércoles 4 de septiembre de este año, un ministro de Estado, Eduardo Del Castillo, tras querer justificar los resultados del censo que son cuestionados por toda la población, mencionó a la diputada nacional Luisa Nayar añadiendo que no puede opinar del tema porque no tiene hijos.

El asunto del censo fue criticado desde varias aristas; asambleas de ciudades como La Paz, El Alto y Santa Cruz, han cuestionado los resultados. De forma específica personajes del ámbito político como los expresidentes Carlos Mesa, Jorge Quiroga y Jeanine Añez manifestaron dudas. Hombres y mujeres hemos declarado dubitación sobre los resultados censales. Y ante todo eso el ministro Del Castillo mencionó a una legisladora mujer joven y esto no denota nada más que su forma de pensar y sentir.

Sea quien sea, la mayor autoridad del Ministerio de Gobierno tiene como tareas desarrollar y proponer políticas y normas para garantizar la seguridad pública, fortalecer la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, regular el ingreso, tránsito, permanencia y salida de personas en territorio boliviano, velar por un sistema penitenciario que promueva la reinserción de las personas privadas de libertad, asegurar el ejercicio pleno de los derechos y garantías constitucionales entre otras.

Sin embargo, cada vez hay menos inversiones en Bolivia, principalmente extranjeras, porque nuestro país no es considerado un país seguro, desde lo jurídico hasta temas laborales, informáticos, viales, etcétera.

Hace unos meses se mostraba con cierta frecuencia el hallazgo de fábricas de droga pero no se arrestó a ningún pez gordo del narcotráfico. A propósito: ¿dónde está Marset?; se han hecho públicos varios casos de desapariciones, de niños y mujeres principalmente que han terminado en muerte, haciendo más notorio el tema de inseguridad para todos; no se habla del asunto de trata y tráfico pero es uno de los males de los que sufre también nuestro país; el sistema penitenciario no tiene resueltos varios temas como la sobrepoblación, la criminalidad y violencia, y el acceso a la justicia como un gran e importante asunto pendiente; además, los derechos y garantías constitucionales no están aseguradas cuando hay presos políticos que están donde están por pensar distinto a lo que el gobierno promulga.

El asunto de tener o no hijos es un asunto personal, de hombres y mujeres, aunque se cuestiona mucho más a las mujeres sobre ese tema principalmente desde visiones machistas y misóginas como las del ministro, que, tras no tener argumentos válidos para justificar el resultado censal, alude asuntos personales.

Que los pensamientos y sentimientos patriarcales no nublen las tareas que tiene como cartera de Estado; y entre todos vayamos eliminando los prejuicios, que tienen que ver con crianza, con liderazgos, con todo, y que deben cambiar hacia un país de todos para todos.

Cecilia Vargas es médica y catedrática universitaria.