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BBC Mundo | 01/08/2022

"La Niña" y los factores económicos que explican la grave sequía en el norte de México (y cómo se prevé que evolucione)

"La Niña" y los factores económicos que explican la grave sequía en el norte de México (y cómo se prevé que evolucione)

Foto: Expansión Política

BBC Mundo

Suministro de agua en casa durante solo siete horas al día. Largas filas para recoger agua con cubos de camiones cisterna. Barcos encallados en superficies que albergaban ríos y que hoy lucen completamente secos.

Imágenes como estas dan cuenta de la grave sequía que se sufre desde hace varios meses en el norte de México, muy especialmente en el estado de Nuevo León y su capital Monterrey, la segunda ciudad más poblada y capital industrial del país.

"Somos víctimas de nuestro propio éxito", reconoció hace unos días el gobernador de Nuevo León, Samuel García. "Fue y es sin duda la peor crisis que ha vivido el estado", dijo, de lo que responsabilizó a su predecesor en el cargo por "no haber invertido" lo suficiente en garantizar el abastecimiento de agua.

La falta de lluvias, la existencia de presas prácticamente vacías y el hartazgo cada vez mayor de la población llevaron al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, a firmar un decreto el pasado viernes en el que la crisis hídrica fue declarada como "un asunto de seguridad nacional".

Según el mandatario, con sus medidas se aspira a garantizar el abastecimiento en Nuevo León durante los próximos "ocho o diez años". Las autoridades fueron blanco de críticas por no haber previsto un plan con el que hacer frente a una sequía ya prevista por expertos en una región acostumbrada a este fenómeno.

El fenómeno La Niña

La sequía que sufre el norte de México se debe principalmente a La Niña, el fenómeno climatológico debido a disminuciones en la temperatura de la superficie del mar en el Pacífico ecuatorial pero que, a nivel global, modifica los vientos y las precipitaciones.

"La Niña hace que deje de llover en el norte de México desde diciembre a mayo-junio e influencia un cambio de patrones que causa temperaturas más calientes y provoca esta sequía que seguimos viendo", dice Christian Domínguez Sarmiento, investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM.


Tanto La Niña como su contraparte cálida El Niño pueden alterar la temperatura global y causar efectos atmosféricos muy extremos. Ambos son eventos frecuentes pero, por lo general, no suelen durar más de un año.

"Lo sorprendente es que esta Niña dura desde 2020, es demasiado y es algo que no ocurría desde hace 20 años", le explica a BBC Mundo la meteoróloga Domínguez Sarmiento.

Según la experta, son multitud de factores oceánicos los que están prolongando esta Niña causante de unas sequías que, como fenómeno natural que existe desde tiempos inmemorables, "no vamos a poder evitar". Sin embargo, alerta, su crudeza sí se vera aumentada cada vez más por las condiciones de cambio climático.

"Los escenarios dicen que de aquí a diez o 20 años podríamos tener sequías más intensas y extremas, principalmente en el norte del país. Y serán más recurrentes. Es decir, que esta Niña que ya dura tres años podría volver a presentarse en un menor tiempo", advierte.

Falta de infraestructura hídrica

La mitad del agua que se suministra al área metropolitana de Monterrey llega de pozos subterráneos, mientras que la otra mitad procede de tres presas con una capacidad total de 1.462,5 Mm³.

Pero, ante la falta de lluvias y con la excepción de El Cuchillo (dedicada principalmente a uso agrícola), sus pobres niveles de llenado lucen ahora alarmantes.

Las recurrentes sequías y el aumento de población en la región -que desde 1990 casi se duplicó hasta los 5,3 millones de personas en 2020- evidencia que "se debió haber invertido en proyectos y más infraestructura" hídrica, le dice a BBC Mundo Ramón Aguirre Díaz, exdirector del Sistema de Aguas de Ciudad de México.

El ingeniero civil experto en agua y saneamiento recuerda el proyecto Monterrey VI, un acueducto que pretendía llevar agua a Monterrey desde el río Pánuco de Veracruz y que fue cancelado en 2016 entre cuestionamientos por posibles daños ecológicos y sociales de la obra.

"El problema es que, al cancelarse, se dijo que había hasta 15 alternativas en estudio… y no fue hasta 2020 que empezaron a construir la presa Libertad, con mucha menos capacidad que Monterrey VI", critica.

En el decreto presidencial firmado este viernes, se incluyó financiamiento para la construcción del acueducto El Cuchillo II y la finalización en 2023 de la presa Libertad, algo que activistas ambientales consideraron una buena solución "a mediano plazo".

La explotación empresarial y agrícola

Según cifras oficiales, la mayor parte del uso del agua en Nuevo León se destina a la suma de uso agropecuario e industrial. Gran parte de estas grandes empresas en Monterrey funcionan mediante la explotación de pozos, gracias a acuerdos de concesión alcanzados con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por un período concreto de años.

Por ello, muchos reclamaron que también se impusieran limitantes a estos sectores en el uso de agua. El propio presidente López Obrador llegó a pedir a las refresqueras y cerveceras de la región que redujeran o incluso detuvieran su producción para destinar a consumo de la población todo el agua que utilizan en sus fábricas...

En las últimas semanas, varias empresas anunciaron que cederían parte de sus concesiones de agua. Hasta el pasado viernes, la Conagua había firmado convenios para que las industrias aporten 500 litros por segundo a la red de agua potable, mientras que las zonas agrícolas citrícolas aportarán hasta 1.000.

Sin embargo, y debido a que estas cifras siguen sin ser suficientes, el decreto firmado por López Obrador da luz verde a imponer un aumento de estas cesiones al contemplar que las autoridades puedan reducir provisionalmente y durante al menos seis meses el volumen de agua de las empresas concesionadas, que quedarán liberadas de su pago mientras dure la iniciativa.

"Esta medida llega tarde porque este pronóstico de crisis se conoce desde hace al menos 18 meses y también es insuficiente: el consumo de la industria y lo agrícola es muy grande y se deberían aumentar esos volúmenes de cesión", cuestiona Antonio Hernández, biólogo experto en asuntos de política ambiental de Monterrey.

En entrevista con BBC Mundo, Hernández pone como ejemplo que la acerera Ternium, la empresa con mayor concesión de agua en el estado, cuente con un volumen de líquido que supone "el 98% de lo que requeriría la población de Monterrey".

"El progreso tecnológico es totalmente legítimo. Lo que no lo es fue haber privilegiado y poner todos los heuvos en la canasta de la industrialización, dejando de ver la importancia de la naturaleza y sus recursos naturales. Monterrey es ejemplo de ello", le dice a BBC Mundo Luis Gerardo Esparza, ingeniero agrónomo especialista en desarrollo rural.

Pero gran parte de la vida productiva de Monterrey está unida a dichas actividades industriales, que a la vez son unas de las grandes consumidoras del agua. "Si no funcionaran (esas empresas), generarías otro problema de índole más socioeconómica. Por eso, lo justo sería regular y actualizar los volúmenes que realmente necesita la industria", responde Hernández.




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