Always Ready le metió siete goles. Más allá de los aciertos en la definición de los jugadores de la banda roja, los errores de los atigrados tuvieron mucho que ver en el resultado.
Brújula Digital, Premium|6|7|25|
El partido más importante de The Strongest en lo que va del campeonato fue un desastre defensivo. Más allá de los aciertos que tuvo Always Ready en ataque, el Tigre fue un flan de mitad de cancha para atrás y recibió una paliza vergonzosa (7-2).
Cada gol de la banda roja tuvo un error del lado atigrado en la marca. Todo empezó en una inexistente contención en el medio sector. Al no estar Álvaro Quiroga, expulsado en el anterior juego, el DT Carlos Bustos no halló un buen reemplazo. Sebastián Altamirano empezó jugando en el medio y no hizo nada importante, salvo un gol.
Los laterales estuvieron flojísimos: Fran Supayabe y Tobías Moriceau no rindieron. También fallaron mucho, a pesar de su experiencia, los centrales Adrián Jusino y Pablo Pedraza. Incluso el golero Rodrigo Banegas tuvo su responsabilidad.
No es un dato menor que el equipo atigrado hubiera recibido dos goles en cada inicio de periodo. En esos comienzos, de paso, hubo desconcentración total.
Los siete goles en contra
1 Darío Torrico cabeceó libremente mientras los zagueros centrales Adrián Jusino y Pablo Pedraza parecían “atornillados” al piso.
2 Fue pobre la reacción del golero Rodrigo Banegas ante un remate “atajable” de Efmanj González.
3 Moisés Paniagua superó con toda facilidad a Franz Supayabe y cedió para Torrico, quien remató la pelota ante la tardía salida de Jusino y Pedraza.
4 Javier Uzeda le ganó la lucha a Tobías Moriceou, ambos fueron al piso, el de Always Ready se levantó y tocó para la definición, otra vez solo, de González.
5 González, sin ninguna presión, remató, el balón rebotó en Pedraza que lo miraba a distancia y cayó otro gol.
6 Paniagua volvió a hacer lo que quiso, nadie lo acosaba, Jusino solo lo vio dejándole espacio para que acomode el balón en el marco de Banegas.
7 El séptimo fue por otra débil marca, esta vez de Sebastián Altamirano, quien le permitió a Paniagua entrar como Pedro por su casa para que de nuevo defina ante la lentitud en la marca de Pedraza y Jusino.
The Strongest, a pesar de ser segundo en la tabla, se convirtió en el tercer equipo más goleado del campeonato: 26 tantos sufridos. Guabirá (29) y Wilstermann (28) aparecen como los peores.
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