La hermana vieja del 52 y sus tres joyas

Seguimos con las dos hermanas de la Revolución Nacional del 52, la ya envejecida sociedad civil corporativista de los sindicatos y la joven sociedad civil ciudadana. Vale aclarar que lo corporativo existe en todas las sociedades (las corporaciones empresarial, obrera, comercial, campesina, la militar, universitaria, etc.), y no es eso a lo que nos referiremos sino al corporativismo que en Bolivia es una forma específica de ser y de actuar en la política nacional que tiene sus raíces más gruesas en 1952.

No es irrelevante el que el veterano dirigente minero Filemón Escobar, portador de la substancia obrerista del 52 con todas sus implicaciones, orientara la Asamblea Popular de 1971 y luego también el surgimiento del MAS-IPSP desde el Chapare cocalero y, con éste, del Estado Plurinacional. En esto puede identificarse un cierto hilo conductor.

Salvando las obvias diferencias históricas, la primera constatación es que ese hilo tuvo y tiene su geografía propia en el occidente y no en el oriente del país, y esto también tiene implicaciones históricas y sociológicas. Y, en lo central, cuando menos desde el 52, dicho hilo parece expresar la identidad del corporativismo sindical y sus tres características clave (joyas): a) su ideología clasista o etnicista; b) su estilo abusivo en la lucha social exterior al Estado; y c) desde 2006 su formato de organización y ejercicio del poder estatal.

1.- Las tres joyas y el cogobierno MNR-COB de 1952 a 1964

Debe recordarse que la COB del 52, a diferencia de la actual, era amplia y poderosa, con su corazón en la no menos fuerte FSTMB, en una sociedad que saliendo de lo semifeudal la tenía como punta de lanza del industrialismo y la modernidad de ese entonces.

De 1952 a 1956, cuando el MNR estructuró su gobierno, el secretario ejecutivo de la FSTMB y de la recientemente creada COB, Juan Lechín, asumió el Ministerio de Minas y luego fue vicepresidente hasta 1960. Se inició el llamado cogobierno COB-MNR, que en lo medular llevó a los dirigentes sindicales obreristas de la COB-FSTMB a ocupar puestos decisorios en el poder ejecutivo nacional.

¿Cómo brillaban las tres joyas de la entonces joven hermana corporativista en ese momento? Su ideología brilló pues el obrero era la clase social predestinada a dirigir la historia del país. Su estilo autoritario y prepotente de acción política se imponía cuando desplazaba a los obreros en volquetas de COMIBOL con sus fusiles en mano o cuando golpeaba a civiles y obreros librepensantes. La creencia de que el Estado era su propiedad se mostraba cuando entendía que los puestos de gobierno que ocupaba eran su territorio exclusivo y eterno.

A veces se culpa mucho a la civilidad del MNR de las tropelías del periodo 1952-64, pero se olvida que ese tiempo fue el del cogobierno MNR-COB, donde la COB fue el brazo armado de la violencia estatal, desde luego con civiles de la clase media radicales apoyando su obrerismo desbocado. Hoy alguien diría, “eran otros tiempos”. Cierto, pero las tres joyas que reaparecerían mucho después durante el Estado Plurinacional ya estaban ahí y tuvieron su primer aprendizaje.

2.- Las 3 joyas y el paroxismo de la Asamblea Popular de 1971

La Asamblea Popular funcionó entre junio y julio de 1971, dos meses. Fue el momento del paroxismo de Filemón y de la izquierda obrerista, del corporativismo. El general Juan José Torres, quizá sin saberlo plenamente, le ofreció la mitad de los ministerios, pero la hermana corporativista quiso tomarse todo. ¿Recuerdan que retiraron del salón del Parlamento las fotos de Bolívar y Sucre? No es casual que aun hoy intenten cambiar –sin lograrlo– el nombre a las ciudades y el año de nacimiento de Bolivia, aunque sí lograron cambiar el nombre del país mismo.

La Asamblea Popular sacó a relucir sus tres joyas con la yapa de los fusiles nuevos (no los viejos máuser del 52 recogidos por Barrientos), que llegaron desde Cuba para los resabios del golpeado ELN. La ideología obrerista se radicalizó. Quiso aplicar la verdadera dictadura del proletariado y lanzó sus primeras medidas tomando la idea del “poder dual transitorio” para ser poder total después. Esto terminó de sepultar a J. J. Torres, que además estaba bajo la mirada de sus camaradas militares que veían cómo el poder se les iba como agua entre los dedos. Aunque las tres joyas de la hermana corporativista aparecieron fugazmente, se visibilizaron con claridad

3.- Las tres joyas y lo máximo del MAS-IPSP en el Estado Plurinacional

El Estado Plurinacional real, es decir no el del diseño semi concertado de la CPE de 2009 (descontando lo novedoso de lo autonómico), no es nada nuevo bajo el sol y porta las joyitas (herencia) más antidemocráticas de la historia política boliviana que viene del 52. Así, a despecho de lo que algunos piensan, el Estado Plurinacional no es lo que René Zavaleta analizara como el nuevo “Estado síntesis” de Bolivia, sino que es solo y nada más que el viejo “Estado instrumental” del corporativismo sindical y cuyas tres joyas ya aparecieron en el cogobierno MNR-COB y en la Asamblea Popular.

En este siglo XXI, la hermana corporativista del 52 ya está envejecida y el apagado brillo de sus tres desgastadas joyas expresa solo lo más conservador, autoritario y corrupto de la sociedad civil boliviana. Ya no porta novedad alguna, aunque para efectos teatrales y de aprendizaje de sus dos ejercicios previos hayan cambiado el guardatojo minero por el lluchu y el poncho indígena.

Por eso mismo desde muy temprano en su gobierno, apenas instalados la Constituyente y el gobierno de Evo Morales, la sociedad civil corporativista desplegó matonaje, prebendalismo y corrupción. Encanecida ya, su ideología se expresó en frases rimbombantes y exageradas, en su indigenismo falso hasta la saciedad y hoy se va perdiendo como espuma de cerveza. Su estilo de acción no respetó los derechos humanos ni el pluralismo político ni el Estado de derecho, lo central de la nueva democracia del siglo XXI. Y, como era parte de la vieja herencia de una de sus marchitas joyas, consideró desde el inicio que el territorio estatal ocupado era de exclusividad suya por los siglos de los siglos amen.

Pero el cogobierno MNR-COB llegó en un momento dado a su la Asamblea Popular tuvo una duración fugaz. Hoy, la hermana envejeció junto a sus tres joyas, sin vuelta atrás. Sin embargo, en noviembre de 2019 apareció la sociedad civil ciudadana, la hermana gemela joven, mostrando nuevas joyas con brillo transclasista, transregional y transétnico. Y cuando su hermana vieja la vio no la reconoció pues no estaba en su “horizonte de visibilidad” y –culpándola de su senectud– la maldijo, la reprimió, la enjuició, la encarceló y la llamó pitita. Vaya.

Carlos Hugo Laruta es sociólogo y docente Investigador de la UMSA.