Dos asambleístas que gritaban “Bolivia dijo No” fueron sacadas del salón. No asistió el presidente Morales. El vicepresidente García Linera, dijo: “... esta gente que no tiene cerebro ni alma, ni propuesta ni discurso”.
Brújula Digital|14|09|18|
Las peleas entre asambleístas oficialistas y opositores, además de insultos, empezaron cuando el vicepresidente Álvaro García Linera inició su discurso, poco antes había recibido un reconocimiento, en medio de gritos de “Bolivia dijo NO”. En este marco se realizó la noche del jueves la sesión de honor de la Asamblea Departamental por el 208 aniversario de Cochabamba.
El presidente Evo Morales no asistió al acto pese a que entregó varias obras durante la jornada del jueves en el área rural y urbana de Cochabamba.
La asambleísta de Unidad Nacional (UN) Claudia Bravo, quien gritaba "Bolivia dijo No", fue sacada a empujones del auditorio por sus colegas del gobernante MAS. Poco después militantes del oficialismo también sacaron del salón a empujones a quienes gritaron y exigieron respeto al resultado del 21F.
El escándalo se registró con mayor fuerza después de que García Linera recibió una distinción y también cuando esta autoridad empezó su discurso, según reportes de medios de la capital del valle.
En los videos difundidos, la asambleísta de Unidos por Cochabamba (UNICO), Lizeth Beramendi, es expulsada del salón a empujones y jalones mientras en coro personas afines al partido de Gobierno gritaban “¡fuera!”.
El vicepresidente García Linera, desde la testera y utilizando los micrófonos, dijo: “... esta gente que no tiene cerebro ni alma; ni propuesta ni discurso; sólo (optan por) la violencia, sólo el insulto”.
“No le faltan el respeto a Álvaro García Linera, le faltan el respeto a Cochabamba y eso es realmente vergonzoso”, dijo el segundo mandatario, mientras recibía los vítores de sus seguidores.
Llegaron a los golpes
De acuerdo con el reporte del diario Opinión, fuera del salón de eventos El Portal de la avenida América, oficialistas y opositores “llegaron a los golpes, mientras el moderador –en el recito– continuaba hablando de la atención gratuita de salud”.
La mayoría de los asistentes comenzaron a gritar “Cochabamba” repetidas veces para acallar a los activistas que defienden el referendo del 21- F. El maestro de ceremonias, para animar la situación, afirmó: “Ya se escucha el grito de Cochabamba en este aniversario”.
Afuera, un grupo de personas gritaban: “Bolivia dijo No” llevando con sigo banderas con la tricolor y blancas con un “21-F rojo”. En el mismo lugar los efectivos de la Policía Militar acordonaron el salón de eventos y se registró un gran resguardo policial.