Sin salud y educación vamos a la deriva

Hospitales móviles donados, falta de antídotos contra veneno de alacranes, el aumento de casos y decesos por el dengue, vienen a acompañar la decadencia educativa que hay en el país ¿Vamos directo a zozobra?

Varios comentaron ya en su momento sobre el desatinado cambio de currícula escolar, realizado de manera muy improvisada y sin tomar en cuenta la formación previa de los maestros y hasta el equipamiento necesario para poder enseñar algunas lecciones o materias que se pretende introducir.

Parches e ideología es lo que la nueva propuesta incluye. Pero deja de lado uno de los verdaderos problemas. Abordar materias básicas y necesarias como la matemática, química o física. Regularmente doy charlas como parte de Tu Beca Bolivia sobre becas. Luego de estas charlas siempre se me acercan jovencitos inquietos que quieren una beca, incluso de pregrado. La más consultada es para medicina. Pero les falla la parte de ciencias. ¿Cómo aspirar a una beca si el conocimiento básico del colegio es deficiente?

Ante esta frustración, muchos optan por caminos donde la matemática o la química no son necesarias. En los últimos años, la avalancha deacademias que preparan para el ingreso a universidades aumentó. Abrir una de estas academias, contratar a unos docentes que les den a los jóvenes lo que debieron aprender en colegio, es un negocio redondo. Y esto se debe a que la educación pública está fracasando en enseñar lo básico que deberían saber estos jóvenes para entrar a la universidad.

Una mala educación, desde luego va a generar una serie de líderes o tomadores de decisión deficientes. Algo que sucede muy a menudo en la gestión pública. Al extremo que en el país es casi imposible hallar antídotos para picaduras de escorpiones, tarántulas o mordeduras de serpientes. Estos días, capturó la atención el caso del niño que tuvo que esperar más de 2 días para recibir la caridad de un antídoto que llegó a destiempo. En algunos de los grupos de profesionales en ciencia, el pedido de antídotos contra mordeduras de serpientes o picaduras extrañas es más frecuente de lo que se imagina.

Lo que sí es común, es que las autoridades en temas sanitarios o ignoran la importancia de contar con estos antídotos o incluso el tema de vacunas que requiere la población infantil. ¿Se acuerda del aumento de casos de tosferina? Bien se pudo prevenir si las vacunas hubiesen sido distribuidas a tiempo.

Y ya ni mencionemos la epidemia de dengue que estamos atravesando, con varias pérdidas de niños. Lo más triste es que todo sirve para hacer gala de populismo. De los hospitales móviles donados por Estados Unidos, o se jactan de los mismos como si fuera algo propio, o se critica con ardor por ser considerados como injerencia del Imperio.

Pero ahí está el resultado de una pobre educación. Muchos son buenos para criticar y rasgarse las vestiduras por donaciones, pero poco o nada hacen para contrarrestar esta falta de medicamentos o los vacíos en la educación básica. Mientras tanto, los escándalos internos de un partido, cubren los titulares. Los temas prioritarios solo hacen ruido momentáneamente y luego volvemos a la normalidad: corrupción, acusaciones triviales, y más. Quizás no soy la única, pero esto se siente como una inminente zozobra y al parecer habrá que tocar fondo para reaccionar.

Cecilia González Paredes M.Sc. 

Especialista en Agrobiotecnología