Las certezas que la gente tiene respecto a la población boliviana es bastante concreta; en primer lugar se sabe que el eje La Paz-Cochabamba-Santa Cruz crece en la misma proporción que decrecen los departamentos que están al norte y sur de este bloque regional. También los ciudadanos están seguros, porque lo viven, que las ciudades son los principales centros poblados. Nadie duda que Santa Cruz es el primer departamento con mayor población, lo que nos falta es saber la cuantía, las proporciones de este “desarrollo asimétrico” potenciado durante los últimos años.
El INE publicó sus datos y aparentemente solo el gobierno de Luis Arce está completamente satisfecho con la información. Al contrario, “hace mucho ruido” en los paceños, el hecho de difundirse el dato que la ciudad de La Paz tiene 755.732 habitantes, 10.736 personas menos que hace 12 años. Que, El Alto solamente haya sumado 36.000 habitantes en un periodo de 12 años. Que, la ciudad de Santa Cruz en el mismo periodo de tiempo solo sumó 150.000 nuevos habitantes. Que, Cochabamba creció solamente 29.000 habitantes (nuevos) en 12 años.
El año 2013, fue la Asamblea Legislativa Plurinacional la que definió, mediante la Ley Nº 421, la composición de escaños, ahora, con los datos del Censo le corresponde esta tarea al Tribunal Supremo Electoral, que tendrá que tomar como único punto de partida un criterio matemático arcaico, cual es siguiente:
“II. Para la distribución de los ciento treinta (130) escaños entre los nueve departamentos, se establece el siguiente procedimiento:
1. Asignación Mínima de Escaños a los Departamentos con Menor Población. Para asignar escaños a los departamentos con menor población, se adopta la siguiente metodología:
a. Se establece una línea base para identificar a los departamentos que tienen menor población y aquellos con mayor número de habitantes, para este cometido se recurre a la medida estadística de tendencia central, denominada media aritmética y que por regla general cuando se trabaja con población se conoce como media poblacional.
b. Se determina también, la media poblacional de los departamentos con: i) mayor cantidad de habitantes y, ii) menor población. Al igual que en el punto anterior, se recurre a la estadística para este cálculo.
c. Se encuentra la razón electoral, que relaciona la media poblacional de los departamentos con mayor cantidad de habitantes, con la media poblacional de los departamentos con menor población.
d. Se vincula el número de escaños totales a distribuir (130) con la razón electoral, operación que permite calcular la cantidad de escaños que se debe asignar a los departamentos con menor población.
e. Se divide la cantidad de escaños obtenidos mediante la relación anterior, entre los departamentos con menor población. El resultado viene a constituir el número de escaños que corresponde a cada uno de los departamentos con menor cantidad de habitantes. Para la asignación de escaños a cada departamento, se toma en cuenta el número entero del cociente y si éste viniera acompañado de decimal o fracción, conforme al resultado del algoritmo matemático, se aplica la regla del redondeo a la distribución departamental.
2. Asignación Mínima de Escaños a los Departamentos con Menor Grado de Desarrollo Económico. Para asignar escaños a los departamentos con menor grado de desarrollo económico, se adopta la siguiente metodología:
a. Se identifica los números índices y se los relaciona con los datos que se tiene: el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de Bolivia como índice sub-cero y el Índice de Desarrollo Humano (IDH) del Departamento con menor Índice de Desarrollo Humano como índice sub-uno.
b. Se determinan dos factores de ponderación expresado en términos cuantitativos. El primer factor está conectado con la cantidad total de escaños y el segundo con el resto de curules resultantes de la primera asignación por menor población.
c. Se relacionan, en la fórmula, los números índices con los factores de ponderación. En el numerador el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de Bolivia, con el factor, y en el denominador el menor Índice de Desarrollo Humano (IDH) departamental, con el factor. El resultado viene a constituir la cantidad de escaños a ser asignados al o los departamentos con menor grado de desarrollo económico. Dependiendo de este resultado, corresponderá distribuir escaños a uno o más departamentos. Para la asignación de escaños al o los departamentos, se toma en cuenta el número entero del cociente y si éste viniera acompañado de decimal o fracción, conforme al resultado del algoritmo matemático, se aplica la regla del redondeo a la distribución departamental.
3. Asignación de Escaños por el Principio de Proporcionalidad. En cada Departamento se asigna escaños de acuerdo al sistema proporcional de la siguiente forma:
a. Se considera el número de habitantes que tiene cada Departamento.
b. Se divide la población de cada uno de los departamentos, sucesivamente entre los divisores compuestos por números naturales (1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, etc.) en forma correlativa y continua, hasta distribuir el resto de escaños existentes después de la aplicación del principio de equidad.
c. Se ordenan de mayor a menor, los cocientes electorales obtenidos de la operación divisoria, hasta cubrir la cantidad de escaños totales, que quedan después de asignar los mismos por el principio de equidad, a los respectivos departamentos.
d. Se asigna a cada Departamento, la cantidad proporcional de escaños que matemáticamente le corresponde.
III. Esta composición será modificada por Ley de la Asamblea Legislativa Plurinacional, después de un nuevo censo nacional de población (Ley Nº 421).
Mi criterio es que el TSE construya su propio método de asignación de escaños en base a la proyección de los diputados establecidos para las elecciones del 2014 y 2020. Sobre esa base, la representación sería coherente con la actual composición poblacional, llegando a Tener Santa Cruz 36 diputados, La Paz 35, Cochabamba 23, Potosí 10, Chuquisaca siete, Tarija y Oruro seis escaños cada uno, Beni cinco y Pando dos representantes. El Índice de Desarrollo Humano IDH está desactualizado y no es un referente actual para la planificación del desarrollo en Bolivia.
Ya el Senado cobija la representación territorial igualitaria del país.