Las armas secretas de algunas empresas

El año 2020 ha marcado tal vez el período más grande de incertidumbre y volatilidad económica que nuestra generación haya enfrentado hasta el momento. En las últimas semanas he conversado con varias personas de empresa en Bolivia y Estados Unidos y el común denominador ha sido cómo la pandemia está amenazando nuestra salud, nuestras vidas y nuestros medios de subsistencia. Otro de los temas recurrentes ha sido la importancia de “reinventarse” para sobrellevar los desafíos actuales.

En ese contexto, un reciente informe de SurveyMonkey, una plataforma digital que permite diseñar y realizar encuestas, se enfocó justamente en consultar cómo empresarios en diversas industrias se están adaptando y prosperando en estos tiempos de crisis.

A través de ejemplos específicos, el informe muestra que algunas organizaciones o empresas se han adaptado rápidamente a las fuerzas cambiantes que han provocado un cortocircuito en la economía, y que no sólo están sobreviviendo sino incluso prosperando.

General Motors, por ejemplo, es uno de los fabricantes de automóviles más grandes que ahora está produciendo miles de ventiladores para mantener con vida a los pacientes con coronavirus críticamente enfermos. GM está combinando su enorme capacidad de producción con el conocimiento de Ventec, una pequeña empresa de tecnología médica.

Otro ejemplo es la ciudad de Breckenridge, en Colorado. Cuando las empresas locales en Breckenridge sintieron el impacto de una caída dramática en el turismo, la ciudad rápidamente se movió para apoyarlas con un millón de dólares en subvenciones. Cuando cada minuto valía oro, la ciudad procesaba rápidamente las solicitudes y distribuía fondos para mantener a flote las pequeñas empresas.

¿Cuáles son entonces las armas secretas de estas empresas? Según esta encuesta, son principalmente dos: la curiosidad y la agilidad.

La curiosidad se traduce en descubrir y probar a presión las soluciones que pueden ayudar a estas empresas a tener éxito. La curiosidad es la voluntad de explorar, buscar nuevas oportunidades y soluciones utilizando datos y comentarios como evidencia.

Y la agilidad se refiere más a actuar con suficiente celeridad y compromiso para enfrentar la incertidumbre y adaptarse a la volatilidad. Agilidad también se refiere a la capacidad y voluntad de actuar rápidamente para adaptarse a nuevos paradigmas cambiando el orden establecido.

El informe de SurveyMonkey está basado en más de 3.275 encuestados de una mayoría de industrias en los Estados Unidos, así como en estudios de casos de organizaciones que están enfrentando la crisis, para comprender cómo las organizaciones exitosas están manejando sus empresas en crisis, formulando sus estrategias, tratando a sus empleados, y otros temas más. La encuesta se realizó a principios de abril del 2020. Los encuestados para esta muestra fueron seleccionados entre los más de 2 millones de personas que realizan encuestas en la plataforma SurveyMonkey cada día. Los datos se ponderaron por edad, raza, sexo, educación y geografía para reflejar la composición demográfica de los Estados Unidos.

Otras respuestas claves

Según datos de este estudio, sólo el 39% de los trabajadores piensa que su empresa está preparada para soportar una recesión económica. Y el 40% de los encuestados (dos de cada cinco personas) dijeron que sus ingresos menguaron o redujeron sus horas de trabajo. Los datos también sugieren que es mucho más probable que las personas asiáticas, hispanas y, en particular, afroamericanas digan que perdieron su trabajo durante la crisis.

En medio de esta intensa incertidumbre, las empresas están cambiando, reduciendo su tamaño y haciendo preguntas relevantes y fundamentales. Y las empresas más exitosas, señala el estudio, están encontrando oportunidades en el caos a través de la curiosidad y agilidad que les permite reinventarse efectivamente.

Según la misma encuesta, por ejemplo, son tres las principales maneras en que las empresas en general están respondiendo a la crisis del coronavirus: 39% está cambiando su estrategia de negocios; 39% está reduciendo personal, horas de trabajo, o la paga de sus funcionarios; y un 35% está consultando con sus empleados y clientes para evaluar opciones de acción inmediata y a mediano plazo.

“Historiadores, economistas y periodistas recordarán las acciones tomadas para abordar los innumerables desafíos de 2020 y recordarán a aquellos que actuaron con rapidez y sabiduría ante la adversidad”, señala SurveyMonkey en un resumen ejecutivo del estudio. “En este momento histórico, todos necesitamos líderes y socios comerciales que puedan enfrentar los desafíos de este nuevo orden mundial, encontrar formas novedosas de operar y, en última instancia, ayudar a impulsar la resolución de esta crisis”.

Lo valioso de este informe es que ofrece nuevas luces y pruebas sobre cómo la agilidad y la curiosidad están ayudando a las organizaciones y empresas a capear la tormenta en estos tiempos del Covid-19.

Pero esto no significa que los gobiernos se queden de brazos cruzados. Los gobiernos y gobernantes también tienen la obligación de facilitar recursos financieros, marcos regulatorios, y todo el apoyo necesario –infraestructura, investigación, logística– para que el sector privado pueda salir adelante de una crisis tremendamente compleja y devastadora.

Ya sea en Bolivia, o en cualquier país del mundo, es imperativo que los sectores público y privado entiendan que la agilidad y curiosidad son las mejores aliadas para mitigar el impacto económico de la pandemia. Las alianzas público-privadas deben ser, en ese sentido, un ingrediente fundamental de cualquier gobierno que pretenda impulsar una estrategia seria para frenar el impacto negativo del COVID-19 en la economía y las empresas.

Mauricio O. Ríos es consultor internacional en comunicación estratégica y resolución de conflictos. Radica en Washington, DC. Es anfitrión del programa de entrevistas “Desde Afuera” de Brújula Digital.