El poder del microscopio

Una de las primeras conexiones que tuve con la ciencia fue a través de un microscopio. Hoy sigue siendo la manera de conectar y sorprender a muchos.

La semana pasada tuve el gusto de ser parte de la feria STEAM 5.0, organizada por Tecnonautas y que transcurrió en la plaza Villarroel. Fuimos invitadas como Chicas Waskiris para realizar actividades que sorprendan a pequeños y grandes.

Con la ayuda de algunas ex becarias, tuvimos una carpa con demostración de la importancia de aprender a programar, una sopa de letras tecnológica, una explicación didáctica sobre material genético, aminoácidos y proteínas, y finalmente un vistazo al microscopio.

El único microscopio en la feria estaba con Chicas Waskiris y por lo mismo fue una experiencia gratificante poder presentar un par de placas que contenían muestras de tejido de cebolla, un corte del tallo de bambú, un pedazo de ala de abeja, y un pedazo de ala de mariposa.

Uno ya tiene certeza que los niños disfrutan ver a través del microscopio, ya que muchas veces ni imaginan los detalles que van a descubrir a través del ocular. Pero lo divertido de este tipo de ferias abiertas es que los niños o adolescentes no van solos y en muchos casos están acompañados de una mamá o de ambos padres.

Al escuchar que los hijos se maravillan y van descubriendo aspectos que no esperaban, los padres quedan con la curiosidad de saber qué está del otro lado de ese ocular y se animan a ver. Aquí volví a descubrir el poder del microscopio que logra maravillar a cualquier edad.

El microscopio fue inventado por el científico holandés Antonie van Leeuwenhoek en el siglo XVII. Desde su invención, el microscopio ha sido una herramienta fundamental en diversas ramas de la ciencia. Ha permitido descubrir y explorar un mundo invisible a simple vista, revelando la estructura de células, tejidos y organismos microscópicos. Gracias a los avances en la tecnología óptica y la invención de nuevos tipos de microscopios, se ha podido obtener imágenes de alta resolución, estudiar fenómenos a nivel molecular y visualizar estructuras a una escala nanométrica. Estos avances han sido fundamentales para la comprensión de la biología, la medicina, la química y la física, entre otras disciplinas científicas.

Estos avances iniciaron con una simple curiosidad y muchos científicos quedaron maravillados con la amplificación que provee un microscopio. Esta claro que si la educación en el país fuera lo que dicen las autoridades que es, muchos de estos jóvenes que nos visitaron, habrían ya tenido la experiencia de haber observado en el microscopio distintas muestras.

Preguntando a varios de los visitantes, si tenían o no microscopio en sus colegios, una respuesta recurrente fue que si lo tenían, no se usaba, y que en varias oportunidades les dicen que no se usa para que no se arruine. ¿Cómo explican que más de 100 estudiantes en mi promoción aprendimos a manejar el microscopio y sin "arruinarlos"? La clave es quien te enseña.

Puede ser que los maestros que se forman para la clase de biología ¿no reciben capacitación para el manejo de este instrumento? Si nuestra población en general no tiene acceso a una mejor educación en ciencia, no podemos esperar que en el futuro a mediano plazo logremos generar mucha innovación, pues los jóvenes con potencia para escoger carreras de ciencia, no tienen la motivación necesaria para decidir y mucho menos, no existe una oferta para desarrollar más investigaciones en distintas áreas.

Quizás es tiempo de desenterrar los microscopios y demás material de ciencias, capacitar mejor a los profesores y permitir que más jóvenes y niños descubran un micro mundo repleto de posibilidades.

Cecilia González Paredes M.Sc. 

Especialista en Agrobiotecnología