El Gobierno necesita dólares y el turismo los tiene

El sector del turismo propone generar lo que ahora la economía y el Gobierno más necesitan: dólares. Además, en las cantidades que la economía requiere; no 15 dólares más por turista. O sea, no una bicoca como la que intenta adicionalmente recaudar el ministro de obras públicas, Edgar Montaño, con el aumento de la tarifa de Derecho de Aeropuerto Internacional, de 25 a 40 dólares.

La medida, propuesta por el ministro de marras, es simplemente una forma de captar dólares para que el Banco Central pueda disponer de algo más de reservas internacionales, y no lo que dice su discurso. Este discurso utiliza la excusa que el aumento financiará sistemas de rastreo para una mejor seguridad de los turistas. O sea, se quiere que ese mejoramiento lo financie el turista que llega hoy para el turista que llegará mañana. Si, efectivamente, se quisiera favorecer esta seguridad, se debería crear primero el sistema de seguridad del viajero con fuentes distintas de financiamiento y no con la excusa propuesta.

El sector turístico puede ser de manera real y efectiva el motor del desarrollo económico del país. Es potencialmente una actividad económica limpia que puede superar en la generación de divisas, creación de empleo, distribución del ingreso a cualquier otra actividad de carácter extractivista como la minería del litio o del oro e incluso el gas. Además, no tiene el rasgo depredador de la naturaleza.

El sector turístico propone al país convertirse en un importante motor de desarrollo económico y generador de divisas. Por esto plantea alcanzar un ingreso anual de 3.000 millones de dólares a partir de 2030, superando así los ingresos de divisas generados por los sectores agropecuario o minero en el país. Esto es, por ejemplo, lo que proponen los operadores de turismo. Rolando Mendoza, miembro de la mesa ejecutiva y del directorio de la Cámara Hotelera, afirma: “Todas las cámaras que trabajan en turismo estamos haciendo una propuesta al país de ser un motor de desarrollo y generador de divisas. La apuesta es 16.000 millones de dólares de ingreso de divisas en los próximos seis años, llegar a 2030 con 3.000 millones de dólares de ingresos (anuales) más que el sector agropecuario, mucho más que el sector de minería”.

Lykke Andersen, investigadora y directora ejecutiva del SDSN Bolivia (Sustainable Development Solutions Network-Bolivia) confirma esta proyección al decir que “Tres mil millones de dólares es lo que el sector agropecuario generó en divisas en 2022, su mejor año en la historia. También es el monto que se exportó en oro, el mejor año de la historia. Y el turismo fácilmente puede llegar a esto, pero sin los daños ambientales que implican estos otros sectores”.

El turismo en Bolivia genera, en promedio, 716 dólares por cada turista que visita Bolivia. Si tan solo se lograra prolongar su visita en uno, dos o más días, se multiplicaría ese monto promedio por dos, tres o más veces. Por cierto, con esos recursos se puede no solo mejorar la seguridad de los extranjeros que visitan Bolivia sino también mejorar la infraestructura que fomente aún más el turismo.