En varios momentos tuve el privilegio de
militar en los derechos humanos, ya sea en la Asamblea de Derechos Humanos de
La Paz y de Santa Cruz o desde el Comité Nacional de Defensa de la Democracia
CONADE. La APDHB fue fundada en tiempos de dictaduras militares, el CONADE se
reorganizó el año 2018 para defender la democracia, la Constitución Política
del Estado, la voluntad popular y los derechos humanos; entonces, la
convivencia con la APDHB y la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de La Paz
fueron inevitables. Sin embargo, hoy en día, la Casa de los Derechos Humanos
ubicada en la Avenida 6 de agosto prosigue tomada por la Policía bajo las órdenes
del ministro de Gobierno como un descarado acto represivo. Recordemos que
durante los gobiernos de Evo Morales se promovió la división y toma de la sede,
mientras que en el de Luis Arce el cierre de la institución es el objetivo que
logró implementarse.
Este 2 de marzo de 2024 se cumplen nueve meses de la toma violenta de estas instalaciones y el desalojo de los activistas de la APDHB y de la APDHLP. Durante estos nueve meses, los defensores de los derechos humanos están privados de reunirse dentro de este ambiente, como también lo están los ciudadanos que tienen diversas denuncias de vulneraciones de sus derechos sin que puedan ser atendidos de forma inmediata. La Asamblea ha promovido el ejercicio de los derechos indígenas, laborales, la defensa de los presos y perseguidos políticos.
El ataque a la APDHB y a la APDHLP fue planificado con mucha antelación y ejecutado reiterativamente en varias ocasiones, años antes. Así, cuando el MAS realizaba alguna movilización, concentración o evento masivo en La Paz, diferentes voceros de sus organizaciones sociales amenazaban con terminar estos actos con la toma de la Asamblea. En una oportunidad, fueron dirigentes y mineros estatales los que se entraron a las dependencias de la APDHB y fueron retirados por el accionar de los activistas.
Una asamblea de derechos humanos independiente, con capacidad de interpelar al Gobierno y las vulneraciones a los derechos de la población, es inaceptable para el MAS, para el autoritarismo negador de la democracia, del Estado de Derecho, y por eso impulsa la intervención física de la misma.
Durante estos años, la APDHB ha asumido la defensa de las personas perseguidas y reprimidas por el actual régimen masista. Cuando Arce llegó al poder, estableció la narrativa mentirosa de la existencia de un supuesto “golpe de Estado”, paraguas político que ha posibilitado la ejecución de lo que hemos denominado un “sicariato judicial”, donde fiscales, policías y operadores de justicia han implementado acusaciones penales destinadas a la detención preventiva de opositores y funcionarios del anterior gobierno constitucional transitorio.
Todo este dispositivo autoritario y vulnerador de garantías constitucionales y procesales fue denunciado por la APDHB y el CONADE. Denuncias documentadas se presentaron tanto a organismos nacionales como internacionales.
En este contexto, se entiende que las acciones gubernamentales estén dirigidas a acallar a la prensa como a los defensores de derechos humanos, porque ambos tienen aspectos comunes como informar, generar conciencia ciudadana, denunciar y promover el accionar independiente de la sociedad civil.
Hoy considero fundamental defender a la APDHB y a la APDHLP. Debemos salir nuevamente a las calles a decirle al MAS que rechazamos esta intervención policial prolongada.