El presidente, Luis Arce, expresó sus condolencias por la muerte y aseguró que el Estado Plurinacional defiende los derechos de los pueblos indígenas y no tolerará la impunidad. Exigió una investigación profunda.
Brújula Digital|16|02|25|
El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, descartó que la muerte del indígena leco Francisco Marupa haya sido por un ajuste de cuentas o una acción de la minería ilegal, y señaló que se debió a problemas personales que tenía la persona que confesó el crimen con la víctima.
En un mensaje en su cuenta de Facebook, Del Castillo indicó que la Policía aprehendió a Julio L.T., de 20 años, quien reconoció ser el autor del asesinato “porque tenía problemas personales con la víctima, por lo que, se descarta muerte por ajuste de cuentas, temas territoriales o minería ilegal, como se especuló”.
El cuerpo sin vida de Marupa, de 67 años, fue encontrado el viernes 14 de febrero en su chaco, en la comunidad Torewa, provincia Abel Iturralde de La Paz. Presentaba un disparo en la sien y varias heridas de machete.
El indígena había sido reportado como desaparecido el miércoles 12.
“El levantamiento del cuerpo sin vida fue con el apoyo de la Armada debido a que la Policía tuvo que trasladarse vía fluvial y posteriormente en carretera. El proceso continúa en investigación”, dijo el ministro.
Presidente lamenta lo ocurrido
El presidente, Luis Arce, expresó sus condolencias por la muerte de Marupa y aseguró que el Estado Plurinacional defiende los derechos de los pueblos indígenas y no tolerará la impunidad, por lo que exigió una investigación profunda.
“Expresamos nuestra profunda consternación por la muerte violenta del hermano Francisco Marupa, del pueblo Leco. Nos solidarizamos con su familia y comunidad en este doloroso momento”, afirmó en un post en sus cuentas en redes sociales, informa ABI.
Arce instó a las autoridades policiales a esclarecer el hecho con “una investigación profunda”.
“Bolivia es un Estado Plurinacional que defiende los derechos de los pueblos indígenas y no tolerará la impunidad. Hemos instruido una investigación para esclarecer los hechos y se haga justicia”, afirmó.
También reafirmó su compromiso con la protección de la vida, los territorios indígenas y la lucha contra toda forma de violencia.
Reacciones ante el crimen
El hecho generó diversas reacciones. Algunas informaciones relacionaron el crimen con un ajuste de cuentas, con traficantes de tierras y mineros auríferos.
La Unión Europea (UE) y sus Estados miembros presentes en Bolivia condenaron la muerte y pidieron a las autoridades que sancionen a los responsables.
“Hacemos un llamado a las autoridades para que se identifique y sancione a los responsables de este suceso; pedimos garantizar la protección del pueblo Leco y de las comunidades que enfrentan amenazas similares”, se lee en un comunicado.
BD/RED