cerrarIMG-20251108-WA0002IMG-20251108-WA0002
Brujula Digital BancoSol PDF 1000x155px
Brujula Digital BancoSol PDF 1000x155px
Vuelta | 18/11/2025

No solo de “likes” vive un gobierno

Hernán Terrazas E.
Hernán Terrazas E.

El riesgo que corren los gobiernos en tiempos de la digitalización es no identificar la frontera entre lo que es gestión virtual de lo que es la administración real. Los éxitos construidos con base en la publicidad son efímeros y no pasan las pruebas duras de lo cotidiano.

Durante 20 años el gobierno anterior habló de las bondades de la nacionalización de los hidrocarburos –supuestamente uno de los grandes hitos en la agenda del socialismo del siglo XXI– para acabar siendo víctima, patética, de sus propias ficciones.

El mito de una transformación basada en la soberanía sobre los recursos naturales se derrumbó y entre sus ruinas se escarban hoy vestigios de lo que, seguramente, se convertirá en una de las mayores estafas de la historia.

Para el armado de la historia del escándalo todavía faltan algunas piezas dispersas, pero seguramente no pasará mucho antes de que se pueda conocer la verdadera historia detrás de la farsa y a sus principales protagonistas.

Lo que hubo no fue un modelo de desarrollo energético concebido para transformar al país en una potencia regional en la provisión del gas.  Se trató solo de aprovechar una coyuntura favorable en precios y mercados para sostener un espejismo de bonanza que, se sabía, iba a diluirse en el tiempo.

Se generó más riqueza, que se gastó mal y, cuando la situación ya no daba para alimentar más el optimismo, los pocos ingresos que se tenía se fueron directo a la corrupción.

El modelo enriqueció a algunos funcionarios, pero nada más. Hoy no hay gas, ni plata y el futuro energético del país –no de muy largo plazo– está en riesgo si no se asumen medidas inmediatas para atender la crisis.

La lección aprendida es que no siempre la frase esa de “miente, miente… que algo queda”, funciona, porque al final la caída de los ingresos y las colas en las gasolineras se encargaron de demostrar que las mentiras tenían combustible para un muy corto plazo.

Los gobiernos de Evo Morales y de Luis Arce invirtieron más que ningún otro en la historia en la partida asignada a la publicidad oficial, en el fortalecimiento de un aparato mediático gubernamental enorme, ineficiente y sin credibilidad; un gasto absolutamente inútil que, como se vio, primero, no sirvió para proteger la retaguardia de la huida de Morales y tampoco la de Arce. Cientos de millones de dólares gastados para crear la ilusión que se hizo añicos con un soplo dramático de realidad.

El gobierno del Presidente Paz debe corregir todo eso. Tiene un enorme valor decirle a la gente las cosas como son, no solo en el diagnóstico de la responsabilidad ajena, sino en la rutina de la gestión propia.

Está bien hablar de las necesidades inmediatas y urgentes, de las soluciones formuladas. Eso compra tiempo. Pero lo que verdaderamente hace falta, después de 20 años de socialismo del siglo XXI, es plantear otra visión, sumar a la gente para una cruzada de largo aliento.

Las redes, la propaganda, la publicidad son cuestión de segundos, de artificio, pero muy poco más. La gente espera un gobierno real, de “carne y hueso”, sin maquillajes, con imperfecciones, pero con la voluntad de llevar las cosas en una dirección determinada y de compartir su visión con todos, porque, a fin de cuentas, eso ya se vio, no solo de “likes” vive una gestión.

Hernán Terrazas es periodista.



BRÚJULA-colnatur diciembre-2024 copia
BRÚJULA-colnatur diciembre-2024 copia
Recurso 4
Recurso 4
ArteRankingMerco2025-300x300
ArteRankingMerco2025-300x300