Vecinos de Santa Cecilia no cesan en su lucha contra el lodo y la humedad

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Bajo Llojeta enfrenta una crisis tras la mazamorra que el pasado 23 de noviembre arrastró 140 mil toneladas de tierra. El desastre dejó 40 viviendas severamente afectadas y a las familias luchando por salvar lo poco que quedó y que la humedad no dañe más sus viviendas.

“Con nuestros propios recursos metimos maquinaria, luego llegó la Alcaldía. Si no hacíamos algo, no creo que hubieran entrado a ayudarnos. Perdí todo, mis muebles están destrozados y ahora mi familia duerme en un cuarto prestado de 2x2. Es mi única casa, no tengo otro lugar donde vivir", declaró Gustavo Amaru, uno de los vecinos afectados de la zona de Santa Cecilia.

Los vecinos intentan limpiar sus hogares para evitar que la humedad siga debilitando las estructuras. Mientras tanto, maquinaria pesada trabaja para retirar el lodo y desviar el agua hacia su cauce original. Sin embargo, algunos habitantes denuncian que el personal de la Alcaldía no está brindando suficiente apoyo y que los trabajos avanzan con lentitud.  

Jimena Jaldín, analista de la Unidad de Manejo de Cuencas del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, explicó que dos excavadoras están enfocadas en retirar el lodo acumulado y redirigir el agua hacia la avenida Los Sargentos. “Es un trabajo complejo debido al empozamiento en algunas zonas, pero estamos sumando más equipo, como una topadora, para acelerar el proceso”, señaló.  

Pese a los esfuerzos, el terreno inestable y las lluvias constantes dificultan las labores. “Es crucial aprovechar los períodos secos para avanzar”, agregó Jaldín, mientras supervisaba los trabajos.  

La comunidad también se organiza para enfrentar la emergencia. Algunos vecinos se dedican a limpiar sus patios y retirar el lodo de sus viviendas, mientras los obreros ayudan a construir defensivos con bolsas de arena para evitar nuevos desbordes en la parte baja.

BD/RED