En Brasil, por ejemplo, donde llegaron más de un millón de dosis de la vacuna el domingo pasado como parte de la reciente distribución por Covax, el virus sigue extendiéndose peligrosamente en todo el país.
Una trabajadora de la salud se prepara para inciar vacunaciones en Uruguay, un país que experimenta una de las mayores tasas de infecciones en la región.
"Es una emergencia de salud pública activa", fue como la directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa F. Etienne, tildó la actual situación de la pandemia en el continente.
Durante una rueda de prensa para informar sobre la llegada a la región de 2,2 millones de vacunas adquiridas mediante la iniciativa Covax, la doctora Etienne advirtió que el virus va en peligroso aumento en muchos países.
Aunque las vacunas están llegando, "todavía faltarán varios meses para que la mayoría de las personas en nuestra región puedan acceder a ellas", indicó Etienne. Mientras tanto, "el virus de la covid-19 no está retrocediendo, ni la pandemia está comenzando a desaparecer".
La directora de la OPS informó que la semana pasada en la región hubo un incremento de 1,2 millones de personas infectadas de covid con 31.272 muertes nuevas registradas por la enfermedad.
Destacó que "la pandemia es particularmente grave en América del Sur" y señaló algunos de los países que enfrentan los más grandes desafíos.
En Brasil, por ejemplo, donde llegaron más de un millón de dosis de la vacuna el domingo pasado como parte de la reciente distribución por Covax, el virus sigue extendiéndose peligrosamente en todo el país.
"Los casos y los decesos están creciendo, y la ocupación de camas en las unidades de cuidados intensivos son altas en varios estados", declaró la directora de la OPS.
Brasil es el país con más más fronteras en Sudamérica y su ritmo de infección pone en peligro a sus países vecinos, indicó la OPS.
En el caso de Venezuela, el incremento de pacientes se está dando en los estados Bolívar y Amazonas, fronterizos con Brasil.
El problema de sobrecarga al sistema de salud y la alta ocupación de camas en las unidades de cuidados intensivos se da también en Paraguay y Perú. En este último país, la ocupación sigue siendo "muy alta en Loreto", según Ettiene.
En Chile, uno de los países que tiene una de las campañas de inoculación más eficientes, se registra un agudo incremento de infecciones y muertes.
Y Uruguay, que hasta hace poco se encontraba en una situación privilegiada con respecto al contagio, ahora reporta una de las mayores tasas de nuevos casos en América Latina.
Además, la pandemia se está acelerando en otras zonas del continente, incluyendo Guatemala, donde el número de casos y hospitalizaciones está "agotando la capacidad de camas en los hospitales debido a la afluencia de pacientes", informó la directora de la OPS.
La zona del Caribe, varias islas incluyendo Cuba, han visto un aumento constante durante semanas. Ni Haití ni Cuba han iniciado su campaña de inmunización y el gobierno de La Habana ha optado por desarrollar sus propias vacunas.
Norteamérica no se queda atrás. En Ontario, la más populosa provincia de Canadá, que colinda con Estados Unidos, se informó de un incremento de casos en las últimas dos semanas.
El jefe médico de esa provincia, David Williams, dijo el lunes que "estamos en la tercera ola" y expresó preocupación de que el programa de vacunación no se está implementando lo suficientemente rápido.
Del otro lado de la frontera, en los estados de Minnesota y Virginia Occidental de EE.UU. se reportan más muertes, según la OPS, y una curva de infecciones que va en ascenso.
"El virus de la covid-19 no está retrocediendo, ni la pandemia está comenzando a desaparecer", declaró tajantemente Carissa Etienne.
Sin embargo, destacó que se han aumentado la cantidad de vacunas en la región, aunque no es suficiente. "Las dosis que han sido entregadas nos han ayudado a empezar a proteger a los trabajadores de salud y otros grupos vulnerables, y esperamos que lleguen más dosis cada semana".
Pero reconoció que no se tienen las vacunas necesarias para proteger a todos, por lo que se deben hacer esfuerzos para "buscar formas de compartir las vacunas de manera más equitativa entre los países".
Aseguró que las vacunas aprobadas por la OMS "son seguras y funcionan" y exhortó al público a que "cuando llegue su turno, no dude y vacúnese".
Recordó que no hay otra región en el mundo mejor preparada para administrar vacunas de manera rápida y segura, lo que será crítico "a medida que se desplieguen e introduzcan nuevas vacunas a la región".
Finalmente, llamó a que el público continúe acatando las medidas de salud pública, incluyendo el uso de mascarillas, lavado frecuente de manos y distanciamiento social, especialmente durante la época de Semana Santa.
"Las personas no pueden bajar la guardia al estar en contacto cercano con los demás", insistió.