Brújula Digital|02|02|25|
Bolivia es parte del denominado Grupo de La Haya, una iniciativa lanzada por nueve países para coordinar medidas de presión contra Israel con el objetivo de frenar lo que califican como “genocidio” del pueblo palestino.
El Grupo de La Haya estableció tres medidas clave. La primera es la ejecución de las órdenes de arresto contra Netanyahu y Gallant. La segunda se enfoca en evitar el suministro de armas, municiones y equipos militares a Israel cuando exista un “riesgo claro” de que puedan ser utilizados para violar el derecho internacional o la prohibición del genocidio. Esta disposición se basa en una opinión consultiva emitida en julio por la CIJ, en la que se concluyó que la ocupación israelí y las políticas de asentamientos violan el derecho internacional, instando a Israel a retirar a sus colonos y desmantelar el muro de separación.
La tercera medida prohíbe el atraque en sus territorios de cualquier embarcación que pueda transportar combustible militar o armamento destinado a Israel si existe riesgo de que estos recursos sean usados para cometer violaciones a las normas internacionales, dijo la agencia EFE.
El grupo, integrado por Belice, Bolivia, Cuba, Colombia, Honduras, Malasia, Namibia, Senegal y Sudáfrica, también ratificó su compromiso con el Estatuto de Roma, el tratado fundacional de la Corte Penal Internacional (CPI), y acordó ejecutar las órdenes de arresto emitidas en noviembre contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, por presuntos crímenes de guerra y de lesa humanidad en la Franja de Gaza.
La creación del grupo se anunció en una rueda de prensa en la ciudad holandesa de La Haya, sede de la CPI y de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Durante el acto, los representantes de los nueve países presentaron una declaración en la que detallaron las primeras acciones que tomarán y extendieron una invitación a otros Estados para sumarse a la iniciativa, promovida por la organización Internacional Progresista.
El documento presentado por el grupo también enfatiza su compromiso con “poner fin a la ocupación israelí del Estado de Palestina y eliminar los obstáculos para el ejercicio del derecho del pueblo palestino a la autodeterminación, incluido el establecimiento de un Estado independiente”. Además, instaron a la comunidad internacional a adoptar medidas concretas para apoyar esta causa.
Durante la rueda de prensa, según la agencia española, la representante cubana Isaura Cabañas Verano denunció los “horrendos crímenes internacionales contra la humanidad, genocidio, castigo colectivo y apartheid que se están cometiendo contra el pueblo palestino”. También destacó el papel crucial de la CPI como “la última esperanza del pueblo palestino”, pese a las presiones y amenazas de sanciones por parte de Estados Unidos.
Por su parte, Assad Shoman, representante de Belice, criticó el concepto de “derecho a la defensa” de Israel y afirmó que es hora de reconocer el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación.
A su vez, el embajador palestino Ammar Hijazi calificó la creación del Grupo de La Haya como un “momento histórico” y denunció que algunas democracias occidentales están sancionando a ONG e instituciones internacionales por sus posturas sobre Palestina.
Hijazi advirtió que, a pesar del actual alto el fuego en Gaza, los crímenes contra la población palestina continúan con impunidad.
“Las bombas habrán dejado de caer, pero los ataques sistemáticos persisten en Jerusalén y Cisjordania, donde militares israelíes y colonos extremistas siguen atacando a la población civil”, afirmó. También alertó sobre el avance de ideologías extremistas que permiten que la comunidad internacional ignore estas violaciones de derechos humanos.
Los nueve países recalcaron “la necesidad de garantizar la rendición de cuentas” y promovieron “la acción colectiva mediante medidas legales y diplomáticas coordinadas” como un “imperativo urgente” para defender los principios de justicia y responsabilidad a nivel global.
BD/RED