Gobierno denuncia ante el cuerpo diplomático que la democracia está en riesgo por amenazas evistas

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La ministra de la Presidencia, Marianela Prada, en su rol de canciller interina, convocó a una reunión extraordinaria con el cuerpo diplomático acreditado en Bolivia. En la sesión, el Gobierno expuso los antecedentes y preocupaciones respecto a la marcha convocada por el expresidente Evo Morales, y señaló que dicha movilización tiene objetivos políticos que amenazan el orden constitucional del país.

Prada informó que la reunión participaron embajadores, encargados de negocios, representantes de embajadas y la coordinadora residente de las Naciones Unidas (NNUU).

"Se presentaron pruebas contundentes, como videos y comunicados, que demuestran que esta marcha tiene como fin el acortamiento del mandato presidencial, tal como lo ratificó Morales en su ultimátum, donde exigió al presidente Luis Arce cambiar su gabinete en un plazo de 24 horas si desea seguir gobernando", afirmó Prada. La ministra destacó la gravedad de las amenazas y denunció las agresiones que ocurrieron durante el desarrollo de la marcha.

Además, subrayó que Morales presentó su pliego petitorio no a través del denominado "Estado Mayor del Pueblo", sino como una organización política. En dicho documento, Morales advirtió que, de no cumplirse sus demandas, se iniciaría un bloqueo nacional indefinido a partir del 30 de septiembre. “Denunciamos ante el cuerpo diplomático que este bloqueo planea cercar ciudades y dejar a la población sin alimentos”, alertó Prada.

El Gobierno, a través de notas enviadas al Secretario General de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y a la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), denunció las amenazas contra la estabilidad democrática del país y el acoso a personas y medios de comunicación que se produjo durante la marcha. Estas notas fueron suscritas por la ministra de Relaciones Exteriores, Celinda Sosa, en representación del Gobierno.

El Ministerio de Relaciones Exteriores, mediante un comunicado público, reiteró ante la comunidad internacional que, durante una concentración el lunes pasado, el expresidente Morales amenazó con interrumpir la continuidad del orden democrático si el presidente Arce no cumplía sus exigencias en 24 horas.

El Gobierno, a lo largo de la reunión con el cuerpo diplomático, reafirmó su vocación democrática y su compromiso con la solución pacífica de los conflictos, rechazando categóricamente cualquier intento de condicionamiento o extorsión. "El diálogo es la única vía para resolver los desacuerdos", subrayó Prada, al tiempo que enfatizó la necesidad de mantener la estabilidad política y social del país.

BD/LE