La marcha evista pasa por el peaje de la autopista y sigue su rumbo hacia La Paz

Brújula Digital|23|09|24|

La marcha evista sigue su rumbo a la ciudad de La Paz y, cuando son las 12:20, ya pasó el peaje de la autopista.

La movilización partió esta madrugada desde la Apacheta y a eso de las 07:30 ya se encontraba en El Alto.

Luego de unas horas, los marchistas hicieron una parada de descanso en la avenida 6 de Marzo, donde hubo gente que se congregó para recibirlos. Al promediar el mediodía retomaron la medida hacia la sede de gobierno.

La alcaldesa de El Alto, Eva Copa, pidió a los vecinos no salir de sus casas cuando pasara la marcha, para evitar enfrentamientos.

“Este grupo solo está viniendo a convulsionar, en todo su trayecto lo que hacen es violencia, amenazan a la gente. (…) Nosotros convocamos a nuestros hermanos de la ciudad de El Alto a no entrar al juego de la provocación, cuando esté pasando esta marcha mejor nos quedamos en casa”, afirmó la alcaldesa en conferencia de prensa esta mañana.

Similar pedido tuvo el defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, quien solicitó a la gente mantenerse a buen recaudo ante el riesgo de que se genere violencia.

“Ante la posibilidad de que se puedan suscitar hechos de violencia, recomendamos y pedimos muy respetuosamente a la población que se encuentra en áreas circundantes a la movilización (que) pueda adoptar una posición de resguardo de su propia persona y de su familia”, indicó el defensor del Pueblo, Pedro Callisaya.

La marcha evista comenzó el 17 de septiembre desde Caracollo para exigir al Gobierno solucionar la escasez de dólares y la falta de combustible y, entre otras demandas, Evo Morales sea habilitado como candidato a las elecciones de 2025.

El martes y el domingo pasados se registraron enfrentamientos entre arcistas y evistas. El primer conflicto ocurrió en la localidad orureña de Vila Vila, unas horas después de que comenzó la protesta.

Este domingo, al menos ocho personas quedaron heridas, según el Ministerio de Salud, luego de que grupos evistas irrumpieran en un cabildo de arcistas en Ventilla.

BD/JA