Brújula Digital |26|6|20|
IME Consulting, la empresa distribuidora de los 170 respiradores de la marca Innova adquiridos por el gobierno boliviano, presentó a la Fiscalía las facturas de los pagos realizados por los equipos y accesorios, con lo que intenta demostrar que no hubo sobreprecio en la operación.
“Las facturas y una nota de GPA Innova desvirtúan la versión inicial en sentido que los equipos costarían aproximadamente 8.500,00 dólares americanos, la cual no contemplaba el costo de los accesorios”, dijo el abogado de la empresa, Ramiro Vega.
La relación de facturas y gastos presentada por la empresa establece que el costo final de cada uno de los 170 respiradores superaba los 15.000 euros, sin considerar el pago del IVA y el Margen Comercial (40%) en España, ni el margen de utilidad de la empresa, que era de alrededor de 5.000 euros por equipo (30% de comisión).
Esta versión es distinta a la de la Fiscalía, que considera que hubo sobreprecio en la compra de respiradores, con un daño al Estado de Bolivia estimado en unos tres millones de dólares. El hecho causó un gran remezón en la política local y provocó la detención de varias autoridades, incluidas la del exministro de Salud, Marcelo Navajas.
Vega aseguró que los respiradores fueron fabricados para el tratamiento de los casos de COVID-19 y que “resulta absurda cualquier posición en referencia a que no serían adecuados para estas circunstancias”.
El abogado anunció que IME ofrece poner en marcha de inmediato y acompañar el funcionamiento de los respiradores entregados en Bolivia, “sin condicionar ello al pago del saldo del precio acordado con el Estado, el que podría realizarse una vez que concluyan las investigaciones y se cuente con el resultado de las auditorías que están en curso”.
“El modelo básico puede funcionar en pocos días si el gobierno permite que el equipo de IME Consulting comience a trabajar. Cabe precisar que este modelo está diseñado para pacientes graves con coma inducido y no depende de la cantidad de camas de Terapia Intensiva con las que cuente el país”, explicó.
Vega destacó que desde el 20 de mayo IME Consulting hizo varias propuestas al gobierno boliviano, “con sacrificios económicos para la empresa y pese a que no existe ninguna irregularidad, para que los respiradores cumplan de una vez el objetivo de salvar vidas”.
Fiscalía
Tras levantarse la reserva del caso, el fiscal Omar Mejillones informó que de acuerdo a las investigaciones existe un sobreprecio y el “proceso de contratación está totalmente viciado”.
El funcionario señaló que el propietario de la empresa española GPA Innova expresó que el precio fue 7.500 dólares de “un ventilador básico”.
“Lo que han hecho es desmantelar los kits y poner a cada kit un precio, cosa de que alcance a los 28.080 dólares, ese es el monto que se hubiera facturado, pero el kit de acuerdo a contrato que se tiene es uno solo y el monto total del ventilador pulmonar es de 6.600 euros”, manifestó Mejillones.
Asimismo, sostuvo que los ahora procesados “tendrían que haber obtenido algún tipo de beneficio, porque conocen perfectamente el procedimiento y lo han omitido”, dijo Mejillones.