El MAS, UD y PDC acuerdan consensuar nueva ley electoral hasta el sábado

Brújula Digital|21|11|19|

Los senadores de Unidad Demócrata (UD), del Movimiento Al Socialismo (MAS) y del Partido Demócrata Cristiano (PDC) anunciaron el jueves que acordaron trabajar por tiempo y materia hasta el sábado, cuando pretenden presentar una norma consensuada y de esta manera facilitar la convocatoria a nuevas elecciones generales en el tiempo más corto posible y con nuevos vocales electorales.

“Ese es el objetivo que tenemos ahora, trabajar por tiempo y materia para que esta ley sea aprobada hasta el sábado”, dijo el senador Homer Menacho, de Unidad Demócrata (UD), en conferencia de prensa conjunta con sus colegas del MAS y del PDC.

Menacho explicó que hay dos proyectos de ley que fueron presentados al Senado el miércoles, uno del Gobierno y otro del MAS. Señaló que la intención es consensuar un solo texto.

El senador Efraín Chambi, jefe de bancada del MAS, ratificó el compromiso de concertar la ley, elegir a los vocales electorales más probos y garantizar las elecciones nacionales y subnacionales. Dijo que el MAS no tiene ninguna doble intención, sino su objetivo es garantizar la realización de nuevas elecciones.

“Estamos en pleno trabajo técnico jurídico en este momento (...), estamos en un trabajo de concertación, de diálogo, permítanos trabajar. No queremos entorpecer este diálogo con tal de garantizar la paz” en el país, dijo.

La senadora Rosario Rodríguez del PDC expresó su compromiso de coordinar con las otras bancadas para aprobar la nueva norma que permita pacificar el país. “Estamos trabajando en forma coordinada con las tres bancadas para lograr la pacificación de nuestro país (...), se está coordinando con las bancadas de Diputados y las organizaciones internacionales. Vamos a trabajar para poder dar paz a nuestro país y para que estas elecciones sean bien claras”, dijo.

La Asamblea Legislativa Plurinacional debe aprobar el proyecto de Ley de Régimen Electoral Transitorio que dará paso a nuevos comicios después de la anulación de las elecciones del 20 de octubre por fraude electoral constatado por la Organización de Estados Americanos (OEA) que dio lugar a la renuncia de Evo Morales a la Presidencia el 10 de noviembre y luego se asiló en México.