Brújula Digital|06|03|19|
El presidente Evo Morales sostuvo el miércoles que el presidente encargado de Venezuela, el opositor Juan Guaidó, que no fue elegido en las urnas para ese cargo, “más parece un virrey colonial”, después que éste retornara el lunes a Caracas tras una gira por seis países durante dos semanas.
"Valoramos que #Europa defienda el multilateralismo, por eso no entendemos cómo, algunos países, desconocen la soberanía de #Venezuela y reconocen como Presidente a alguien no votado para ello y que más parece un virrey colonial", se lee en la cuenta de Twitter de Morales.
Guaidó, quien también es jefe del Parlamento, logró reactivar las protestas y estrechar el cerco diplomático contra el régimen de Nicolás Maduro desde que el pasado 23 de enero se juramentó como presidente interino, luego de que el Legislativo de mayoría opositora declarara al gobernante como "usurpador" que el 10 de enero empezó su segundo mandato, considerado ilegal.
El presidente Morales manifestó que el hecho de reconocer a alguien que no fue votado en las urnas es un precedente "peligroso" para el derecho internacional y la democracia, igual que es dañar la "ayuda humanitaria", según reporte de ABI.
Guaidó busca elevar la presión interna para desalojar a Maduro, luego de que el Grupo de Lima -integrado por Canadá y 13 países latinoamericanos- descartara su apoyo a una intervención militar, una alternativa que el gobierno de Donald Trump mantiene en su agenda.
"Este ‘reconocimiento’ es un precedente peligroso para el derecho internacional y para la democracia. Igual que lo es el dañar una institución tan importante como la ayuda humanitaria. Esto debilita el multilateralismo", señala otro tuit de Morales.
El líder opositor Juan Guaidó advirtió el martes que la presión contra Maduro "apenas comienza" y respaldó una propuesta de "paro escalonado" de funcionarios públicos. También convocó para el sábado a manifestaciones multitudinarias en toda Venezuela.
Para el mismo día, Maduro llamó a "manifestaciones antimperialistas", cuando se cumplirán cuatro años desde que el expresidente Barack Obama impuso las primeras sanciones a funcionarios chavistas.