Dos analistas consideran que en caso de que en ambos países acepten este tipo de pagos, “podría ayudar al comercio bilateral”, pero no va a abaratar costos, porque las monedas se cotizan en relación con el dólar.
Billetes yuanes y reales. Fotos:EFE
Brújula Digital|27|05|24|
Ante la falta de dólares en el país, al menos dos economistas advirtieron este lunes por separado que el uso de yuanes y reales para los importadores será solo un paliativo, y que dependerá, además, de los empresarios chinos y brasileños, además del tipo de cambio en cada país con relación al dólar
“Es una medida muy parcial y simplemente, ayuda a ganar el tiempo, pero no resuelve el problema de la escasez de dólares que es estructural en Bolivia”, sostuvo el economista Gonzalo Chávez, en contacto con Brújula Digital.
El presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, explicó que, si se pretende que las importaciones sean pagadas con la moneda de estos dos países y las exportaciones con dólares, también se requieren acuerdos bilaterales para su aplicación y vigencia. “Se requiere no solo mecanismos bancarios internacionales, sino también diplomacia y acuerdos bilaterales de comercio exterior para que esta política sea factible”, dijo.
Ambos economistas coincidieron en señalar que en China y Brasil las empresas exportadoras privadas tendrían que estar de acuerdo en hacer negocios de esta manera, pues los negocios internacionales son en dólares.
Dijeron que en caso de que en ambos países acepten este tipo de pago, “podría ayudar al comercio bilateral”, pero no va a abaratar costos, porque las monedas se cotizan en relación con el dólar.
“Tanto el real como el yuan representan un porcentaje muy bajo del total de exportaciones mundiales. El dólar y el euro controlan el 90% del comercio mundial. Entonces, pues, habrá que ver si en la práctica eso funciona”, añadió Chávez.
Sin embargo, precisó que los productores chinos al igual que en Bolivia buscan dólares, dificultando así la posibilidad de un posible acuerdo. Chávez indicó que Bolivia tiene un déficit comercial con China y un superávit con Brasil.
En el caso de China, el déficit significa que Bolivia importa más de lo que vende a este país, por lo que aumentaría la deuda en yuanes, lo cual podría no ser beneficioso a largo plazo. Por otro lado, en el caso de Brasil es al revés, Bolivia tiene un superávit sobre Brasil, lo que significa que hay que ver si Bolivia aceptaría que el pago por el gas que se exporta se realice en reales, ya que también podría haber un déficit en otras transacciones con Brasil.
La escasez de dólares en Bolivia se ha agravado desde diciembre de 2022, pero el Gobierno no reconoció el problema hasta dos meses después y aún no ha logrado resolverlo. Esta situación ha provocado protestas de diversos sectores, incluidos farmacéuticos, gremios y exportadores.
Ambos economistas dijeron que, como resultado, de la falta de dólares, los precios de productos farmacéuticos y de la canasta familiar han aumentado, y el dólar paralelo se ha disparado hasta alcanzar los nueve bolivianos, superando en más de dos bolivianos el cambio oficial.
La escasez de dólares, dijeron, ha hecho que en reiteradas ocasiones el Gobierno vea la posibilidad del uso de yuanes como una alternativa de solución.
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