Los personajes de esta serie llegaron a ser lo que se llama “el misógino adorable”, que consiste en personajes cuya versión de la masculinidad está representada como “cómicamente patética” y su estado de “chicos buenos y ñoños” les permite salirse con la suya.
"Big band theory" llega a su fin tras 12 años en el aire.
Llegaron a ser lo que se llama “el misógino adorable”, que consiste en personajes cuya versión de la masculinidad está representada como “cómicamente patética” y es su estado de “chicos buenos y ñoños” lo que les permite salirse con la suya con una amplia variedad de comportamientos perturbadores y sexistas.
Antes de seguir, repasemos un poco el arquetipo del “geek” que Hollywood ha cimentado en el inconsciente colectivo. En 1984 la película más popular del verano en Estados Unidos fue “La venganza de los nerds”. Si bien, no fueron los primeros “ñoños” en aparecer en la pantalla grande (en 1963 Jerry Lewis encarnó al “Profesor chiflado”), si ayudaron a popularizar ese tipo de personaje.
En los años siguientes este arquetipo cobró mucha fuerza en las películas sobre adolescentes y para principio de los 90 se convirtió en una muletilla de entretenimiento en series y películas (tan solo recordemos a Dustin Diamond como Screech en “Salvados por la campana”).
Cabe resaltar que estos personajes son casi siempre blancos, aunque hay excepciones, como la de Jaleel White, en “Todo queda en familia” (1989-1998). Bolivia no estuvo exenta de esta tendencia y la exitosa comedia “Engaño a primera vista” se inscribe dentro de ella.
El nerd de Hollywood se coloca casi siempre en oposición a las expectativas de la masculinidad del “macho”. Se lo contrasta con hombres hipermasculinos (según las convenciones sociales), que ejecutan su hombría de una forma tosca y agresiva, por lo que nuestro héroe “ñoño” es representado como una alternativa más inteligente y sensata. Es el tipo “bueno e incomprendido” que ha sido víctima de las burlas de sus compañeros. En resumidas cuentas, es presentado como el que claramente lleva las de perder en “la carrera de la hombría”.
Sin embargo, cuando los examinamos más detenidamente, empezamos a notar que estos personajes muestran comportamientos de acoso y sexismo. Consistentemente siguen, espían y tratan de manipular a las mujeres que los rodean. Se rehúsan a aceptar un “no” como respuesta e ignoran a menudo los principios básicos del consentimiento.
Tanto en “La venganza de los nerds” como en “Sixteen candles”, otra película de los 80, se incluyen escenas en las cuales los tipos “buenos y ñoños” cometen actos de agresión sexual. Este comportamiento debería mostrarse como reprensible, pero como esos hombres son “vulnerables”, entonces se permite.
Volvamos a “La teoría del Big Bang”. Los cuatro personajes del show han sido descritos como sujetos agradables, que son capaces de ofrecer sensibilidad y dulzura, pero sin eliminar por completo una suerte de “misoginia inofensiva”. Sin embargo, en la serie todos ellos logran tener pareja, aunque con relaciones difíciles. Estas son Bernardette (Melissa Rauch), esposa de Howard; Amy (Mayim Bialik), novia de Sheldon; y Penny (Kaley Cuoco), enamorada de Leonard. (Raj tiene relaciones más incidentales con mujeres).
Empecemos por Howard, el “nerd judío” de la serie. Durante las primeras temporadas fue presentado como el aspirante a “conquistador”. Acosa, cosifica y trata de engañar a casi toda mujer que puede para que se acuesten con él. En muchas ocasiones, Howard habla de las mujeres como si fuesen animales salvajes y él un cazador listo para “domarlas”. Manipula y conspira, pero una vez que se casa, su machismo cambia un poco: deja de ser un Don Juan, pero aun así exige que cuiden de él y se rehúsa a tomar parte de cualquier responsabilidad doméstica.
Luego sigue Rajesh, el tipo sensible que se transforma en el “borracho inapropiado”. Es el “nerd indio” que es constantemente ridiculizado por sus amigos al ser el más “afeminado” de los cuatro. Es más sensible y disfruta de hacer “cosas de chicas” (recordemos que Hollywood siempre se ha mofado en sus películas sobre el tipo de masculinidad del hombre asiático). Por otra parte, es el que es más socialmente torpe con las mujeres y no puede hablar con ellas si no toma primero un trago.
Leonard es el tipo agradable que sirve de facilitador del sexismo a sus amigos. Participa en los mismos comportamientos que sus compañeros, solamente que en menor medida. La historia de Leonard es la del tipo bueno que se niega a tomar un no por respuesta, y eventualmente consigue a la chica. Podrá parecer que a veces está en desacuerdo con el comportamiento de sus amigos, pero nunca los cuestiona seriamente. Es el más “normal” del grupo.
Finalmente, Sheldon es el misógino prejuicioso. La mayoría de los personajes que mencionamos muestran desdén por las cosas “desagradables” de las mujeres, pero Sheldon es el personaje que guarda la forma más virulenta de misoginia.
La gracia del personaje de Sheldon es que es demasiado inteligente para entender, o interesarse en entender, qué es y no es socialmente apropiado. Por eso desdeña a casi todas las personas, pero cuando lo hace con las mujeres, es específicamente porque son mujeres. En un episodio se refiere a Marie Curie como una especie de “hombre honorario” por haber descubierto el radio, y que por ello tendría “un pene hecho de ciencia”.
La pregunta es ¿cómo hace una serie como ésta para mantener la simpatía de la audiencia durante tantos años? Porque la inseguridad (de los personajes y de parte de la audiencia) es muy alta y porque en la serie todos se ríen de las debilidades de los otros.
La mayoría de los escritores saben que la intolerancia retrograda, el sexismo, el racismo y la misoginia ya no son aceptables en el “prime time” televisivo, pero al tratarlos de forma humorística, se salen con la suya. El objetivo de muchas de las bromas no es la misoginia en sí, sino en burlarse de hombres que no son lo suficientemente masculinos en la forma tradicional.
Jerussa Pozo escribe de temas de cine y de artes.