Bajo San Isidro: unas 7 viviendas corren riesgo de desplomarse y Alcaldía dice que ya debieron ser desocupadas

Brújula Digital |13|2|24|

Vecinos de Bajo San Isidro advirtieron este lunes que al menos siete viviendas corren el riesgo de desplomarse por efecto de las filtraciones de agua. Algunas familias habrían dejado el lugar y otras piden a la comuna un espacio para trasladar sus pertenencias. El alcalde Iván Arias informó que el problema no es reciente sino de hace años y que por lo tanto los vecinos ya debieron desocuparlas por precaución.

“Prácticamente toda esta cuadra, como usted podrá ver, hablamos de unas siete casas, por lo menos, y más la parte de abajo, más todavía; se están haciendo trabajos en la parte de debajo de estabilización, pero el problema está ocurriendo acá; el movimiento de la Av. Nieves Linares para que quede constancia también”, dijo un vecino entrevistado por Unitel.

Otro vecino dijo que “estamos en zozobra y no sabemos qué hacer, mi vecino está más afectado, pareciera que se quiere venir abajo, toda la avenida; estamos con ese miedo porque siguen filtrando las aguas”, pues “aguas limpias es lo que están entrando por las viviendas, pero no sabemos de dónde viene”.

Los vecinos de Bajo San Isidro dijeron que la Alcaldía de La Paz es la supuesta causante del problema porque realiza trabajos de estabilización y para el efecto se efectúan labores de captación de aguas subterráneas, lo que, según los habitantes de la zona, habría provocado la situación de emergencia.

Según el presidente de la zona, Marco Salazar, al menos 20 familias están afectadas y podrían quedar en la calle si la Alcaldía no toma acciones inmediatas debido a que siete viviendas están en riesgo de derrumbe, algunas presentan rajaduras en las paredes.

El alcalde Arias informó que el problema en Bajo San Isidro no es reciente, las casas en riesgo debieron ser demolidas hace rato y que sus propietarios ya debieron desocuparlas. “Le quiero decir que no es de ahora, son viviendas ya precarias de hace mucho tiempo que están advertidas que deben salir y, es más, algunas de ellas deben ser demolidas por los propios propietarios. Y efectivamente en tiempo de lluvia se agrava el conflicto, pero no es descuido, no es falta de atención, sino que son viviendas que están afectadas desde hace tiempo y se les ha pedido que desalojen, se les ha pedido que tomen medidas preventivas”, afirmó a la red Uno.

El burgomaestre también informó que no son siete sino cuatro las viviendas en riesgo. “Son solamente cuatro (viviendas) que ya venían con un problema, pero que venían con un problema anterior. La zona tiene ocho mil familias, a cada familia la tenemos censada, de cada familia sabemos cuántos discapacitados, cuántas personas de tercera edad hay. Es decir, por favor, es un caso que ya los vecinos, los dueños mismos saben que deberían tomar medidas preventivas con mucha anticipación”, aseveró.

Arias reiteró que las cuatro viviendas ya presentaban problemas estructurales previos y al tener el municipio registro de todas las familias en la zona, aseguró haber entregado notificaciones de evacuación preventiva.

Cuando la prensa llegó al lugar se verificó que una de las viviendas tiene serias rajaduras en su estructura, en el piso, pilares y paredes; mientras que, en la otra, la mitad de uno de los cuartos se deslizó a la parte inferior.

Por esta razón y ante el peligro de derrumbe varias familias, la mayoría inquilinos o anticresistas, abandonaron la casa y otras aledañas, pero los dueños no pudieron hacerlo, ellos demandan un lugar para trasladar sus pertenencias.

Al respecto, la subalcaldesa de San Antonio, Gabriela Godoy, informó a Brújula Digital que, si se diera el hecho, de tener que evacuar a las familias, tomarían las previsiones necesarias, aunque descartó que esto suceda.

Explicó que la zona de Bajo San Isidro tiene problemas de suelos desde hace 40 años y reconoció que una calle más abajo del lugar, donde reportan rajaduras en las casas, se realiza la obra de captación de aguas subterráneas y por el peso de las viviendas, sumado las lluvias hizo que haya un “leve” movimiento de tierra.

“Se colocaron testigos en el sector y personal de emergencias está atendiendo las demandas de los vecinos. Se emitió memorándums de prevención para el caso de que existe un mayor movimiento, los vecinos están alertados para recibir el memorándum de desalojo, pero no es de mayor peligro”, sostuvo Godoy.

Para mitigar los efectos de las lluvias, obreros del municipio colocaron yutes con tierra para que el agua no se acumule sobre la vía, también instalaron testigos o sellos de estuco y cemento en las rajaduras para verificar si se registra movimiento del terreno.

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