"Estamos muy preocupados por lo que vaya a pasar el 2025 porque después de las lluvias de este año, en marzo, debían trabajar en planes de prevención, pero no se ha hecho", afirmó Samuel Vásquez, expresidente del Colegio de Arquitectos de La Paz.
EFE|06|12|24|
Daniela Romero
Ante las primeras lluvias registradas a finales de noviembre en Bolivia, que ya dejaron 13 muertos en diferentes circunstancias, especialistas temen que en los primeros meses de 2025 haya riesgo de más inundaciones y derrumbes por la falta de planes de prevención y el descuido de la población.
"Estamos muy preocupados por lo que vaya a pasar el 2025 porque después de las lluvias de este año, en marzo, debían trabajar en planes de prevención, pero no se ha hecho", afirmó a EFE Samuel Vásquez, expresidente del Colegio de Arquitectos de La Paz y experto en urbanismo.
Las lluvias superaran los niveles normales
Kenny Quisbert, uno de los técnicos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología de La Paz (Senamhi) dijo a EFE que las recientes lluvias superaron los niveles normales.
"Hemos tenido precipitaciones bastante intensas en la sede de Gobierno, hemos sobrepasado bastante los (niveles) normales a nivel nacional. Los valores han sobrepasado los niveles en noviembre", aseguró.
Explicó también que, si bien se espera que el fenómeno de La Niña, que ya está ingresando, se mantenga con su lógica de que haya más lluvias en el occidente que en el oriente de Bolivia, hay variaciones que pueden ingresar al país, lo que provocaría precipitaciones en regiones orientales, algo que tiene que mantener en alerta a las autoridades y ciudadanos.
"Esperamos valores dentro de lo normal en gran parte del territorio, sin embargo a este último aporte de las lluvias que se han dado en noviembre podríamos experimentar algún tipo de evento de carácter hidrológico, como crecida de ríos y desbordes", anunció Quisbert.
Desastre en La Paz
Una de las regiones más afectadas fue La Paz, donde hace dos semanas una riada con lodo tras el desborde de un río dejó una niña muerta, 40 viviendas sepultadas y más de 80 personas evacuadas en el barrio Bajo Llojeta, un área de "alto riesgo" debido al suelo inestable y a movimientos de tierras que se realizan en la parte alta.
Vásquez indicó que los suelos de La Paz soportan "tres grandes cuencas y más de 300 ríos subterráneos", lo que hace que sea "un territorio frágil y vulnerable ante estos eventos de lluvias".
"Hay en total 36 áreas de riesgo. A las zonas de alto riesgo, como Bajo Llojeta, deberían haberlas atendido con prioridad pero no hubo un plan de prevención serio y responsable", aseguró el también experto en urbanismo.
La situación en Bajo Llojeta
Lo que queda de la zona afectada son viviendas que tienen el lodo hasta el techo y vehículos sepultados, debido a las lluvias que cayeron los días posteriores que formaron lagunas de agua sucia y la maquinaria pesada trabaja para sacar todo el lodo y el agua, constató EFE.
El expresidente del Colegio de Arquitectos explicó que en este tipo de situaciones hay tres responsables: las alcaldías que no realizan controles a las nuevas edificaciones, las empresas constructoras que levantan viviendas en lugares prohibidos y los ciudadanos que "aún no tienen educación urbana".
"Hemos perdido todo, nos han tenido que sacar del techo de mi casa para salvarnos la vida. Estamos en el albergue hace dos semanas y necesitamos desde camas hasta alimentos", dijo a EFE una mujer cuya casa quedó sepultada.
Casos en otros lugares del país
El domingo cuatro personas, entre ellas dos menores de edad, fallecieron por el deslizamiento y derrumbe de una masa de tierra que aplastó su vivienda, en un suceso en la región del Trópico de Cochabamba. Una quinta persona, que fue arrastrada por el río, fue encontrada sin vida en la víspera.
A estos se suman ocho decesos más ocurridos desde el inicio de la temporada de lluvias en Chuquisaca, La Paz y Tarija.
"Lo que preocupa es que no se trabaja con planificación, sino con improvisación. No estamos preparados", añadió Vásquez.