Carlos Laguna, exgerente de Los Tiempos: "Valdivia todavía me debe montos que presté a la empresa"

Brújula Digital|02|09|24|

Raúl Peñaranda U.

Brújula Digital|02|09|24|

El 29 de noviembre de 2023 se oficializó la operación de compra y venta del periódico Los Tiempos a favor del empresario Juan Valdivia, quien era hasta entonces socio minoritario de Editorial Canelas. Valdivia es considerado un empresario cercano al oficialismo.

Concluía con esa compra-venta un amargo proceso de negociación, que incluyó denuncias públicas de la familia Canelas contra Valdivia durante el año 2023; se lo acusaba de aprovechar sus relaciones con el Gobierno y el sistema judicial para impedir que la empresa pudiera vender algunos de sus numerosos bienes inmuebles y de esa manera enfrentar sus problemas financieros.

Carlos Laguna, un empresario oriundo de Cochabamba y que vivía en EEUU, estuvo en el centro de las negociaciones para intentar salvar el periódico y evitar que “pase a manos del grupo Valdivia”, según expresó.

Antes de involucrarse en Los Tiempos, Laguna estudió varios tópicos en diversas universidades, como economía en San Simón de Cochabamba y en Belem do Para, Brasil; en distintos años estudió comunicación periodística y literatura, sociología y física en el Northern Virginia Community College, Estados Unidos. También cursó comercio internacional en la Universidad George Mason, de Virginia. Fundó en 1990 el periódico de corte político “The Leaders Voice” en Washigton DC. Actualmente es colaborador de la agencia Associated Press y dirige dos empresas en EEUU: una de energías alternativas y otra de construcción.

Brújula Digital entrevistó a Laguna por teléfono para conocer detalles del traspaso de acciones al grupo Valdivia. Dijo que el nuevo dueño del periódico todavía le debe dineros que él prestó a la empresa; también aseguró que tres miembros de la familia Canelas cometieron estelionato contra él (acto de vender algo previamente vendido a otra persona). Por esa razón, expresó, deberían ser procesados y detenidos. Estas son las partes principales de la entrevista:

¿Cómo se involucró en la gerencia de Los Tiempos?

Yo estaba muy preocupado por las informaciones que recibía sobre la mala situación de Los Tiempos. Para evitar un eventual cierre, me acerqué a la familia Canelas para ver si había algún chance de comprar las acciones. Comenzamos las negociaciones en 2021 y en 2022 ya estaba involucrado como director de Informática, manejando toda la parte digital. Después, les hice a los miembros de la familia Canelas una propuesta porque querían vender el periódico. La situación económica del periódico, como la de muchos medios de comunicación tradicionales en el mundo, era difícil. Ellos querían vender a Juan Valdivia, lo cual me parecía una barbaridad por sus relaciones con el oficialismo. Les dije que, en lugar de venderle a Valdivia, me vendieran a mí. Las conversaciones fueron exitosas: firmé un contrato para la compra progresiva de las acciones.

Hicimos un convenio para que yo comprara las acciones. Así entré como gerente general para administrar el periódico, y luego pasé a ser presidente del directorio.

¿A quién le compró usted?

Compré las acciones de María Reneé, Berta Rosa y Fernando Canelas.

¿Qué porcentaje tenían ellos?

Compré el 49,98% porque cada uno tenía el 16,66%. Hicimos un convenio de pago: no les pagué todo de una vez, sino que acordamos hacerlo en el transcurso de tres años: 2022, 2023 y 2024. Pagué las dos primeras cuotas y estaba a punto de pagar la tercera.

De niño me crié en Cochabamba, pero después del colegio me fui del país. Y en EEUU me acostumbré a que los contratos se cumplen, se toman en serio. Hice un contrato con ellos, pero no fue cumplido.

¿En qué monto se trataba? ¿Se puede saber?

Preferiría no entrar en detalles sobre los montos por una cuestión de lealtad. El primer año pagué una parte, el segundo año otra, y planeaba terminar de pagar todo en el tercer año. Estaba dispuesto a salvar el periódico porque me interesa mucho la libertad de expresión. Con Luz Marina Canelas (la última directora antes de que el grupo Valdivia se hiciera cargo) acordamos que lo haríamos. Sumando las acciones del padre de Luz Marina, teníamos mayoría. Luz Marina es mi pareja.

¿En qué sentido los compradores no cumplieron con el contrato?

Bueno, en el sentido de que María Reneé, Berta Rosa y Fernando Canelas vendieron a fines de 2023 las acciones que eran mías según el contrato. Las vendieron al Grupo Valdivia. Eso es estelionato. Me ausenté a EEUU, yo era presidente del directorio, gerente general y tenía los documentos para hacer los pagos en tres años, y ellos aprovecharon esa ausencia para actuar de ese modo. Vendieron algo que no era de ellos.

En Estados Unidos, Valdivia y esos tres socios, estarían en la cárcel porque lo que han hecho es estelionato. 

¿Los tres compradores no le devolvieron el dinero después de que vendieran las acciones al grupo Valdivia?

Mira, esa es otra historia. Me han devuelto, sí, pero solo el 35%. Tuve que aceptar, porque era eso o nada.

El periódico tenía unas dificultades económicas tremendas. Debíamos a todo el mundo y, para decirte la verdad, mi mayor preocupación era la deuda con los bancos. Lo primero que hice fue hablar con los bancos y plantearles soluciones. También intenté negociar la venta de algunas propiedades para resolver el problema. Sin embargo, el problema más grande era con el fisco y el Gobierno, ya que no se habían pagado impuestos. Además, Valdivia, que poseía el 16,66%, y tenía presencia en el directorio, impedía mediante vías judiciales que se pudieran, por ejemplo, vender algunos bienes que hubieran permitido saldar deudas y salir adelante.

Para ser honesto, la tercera generación de cualquier gran empresa suele enfrentar dificultades. Los nietos, es decir los hijos de Carlos Canelas, eran jóvenes ricos que terminaron destruyendo el periódico. Cuando llegué, el periódico estaba altamente destruido y se había convertido en una carga para ellos. Luz Marina es la única que seguía trabajando duro, como su abuelo, desde las seis de la mañana hasta las diez de la noche.

Intenté resolver los problemas con los bancos y me reuní con gerentes de diferentes instituciones. Lo que más me afectaba eran los impuestos. Tomé medidas serias para resolverlo y me reuní con el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, el ministro de Justicia, Iván Lima, y con el Ministerio de Comunicación. Estaba en medio de todo esto cuando ocurrió lo que te dije, que vendieron esas acciones que ya eran mías. Ellos pusieron excusas de que yo aún no había pagado todo, pero yo tenía tres años para hacerlo.

¿Cuánto alcanzó Ud. a pagar?

Conseguí pagar un tercio del monto acordado, los otros dos tercios aún estaban pendientes. Tengo todos los documentos que prueban esto. Ellos argumentaron que no lograría sacar adelante el periódico y por eso decidieron venderle a Valdivia sin mi autorización y en mi ausencia.

¿Hará intentos para cobrar?

Como dije, me he resignado a recibir solo el 35% de lo que yo pagué a los tres. En realidad Juan Valdivia no tiene la culpa. Él ha tomado una oportunidad. Es un empresario que ha tomado una oportunidad y ahora está haciendo lo mejor que puede con la oportunidad que ha tomado, esa es la verdad.

Pero hay otra cosa: Valdivia me debe una barbaridad de dinero porque he puesto dinero, aparte de pagar a los socios, he puesto bastante dinero en el periódico como préstamo cuando yo era gerente general. Claro, ese préstamo era a la administración anterior, no a Valdivia. No había, por ejemplo, dinero para pagar a los bancos. Venía aquí a Estados Unidos, traía dinero y pagaba al banco, y en eso se ha hecho alrededor de 181.000 dólares.

¿Entonces eso debe la nueva administración que está a cargo de Valdivia?

Exactamente, Valdivia todavía me debe montos que presté a la empresa, todo está bien documentado, ya que yo prestaba a Editorial Canelas como préstamo personal porque el periódico no estaba rindiendo. No había para pagar las prestaciones a los bancos, entonces yo iba pagando, pagaba 10.000, 20.000, 30.000, hasta sumar 181.000 dólares.

Obviamente eso Ud. lo está intentando cobrar, ¿ qué le han dicho en la empresa?

Solo me han dado respuestas dilatorias.

¿Y el resto de las acciones quién las tiene? Usted me dijo que compró el 49,98%.

Al final, Valdivia compró todo. Tenía previamente 16,66% que compró antes a otro de los hermanos Canelas. Una hermana de Luz Marina -Gabriela-, vendió también 16,66% de acciones a Valdivia gracias a que tenía un poder notarial entregado por su padre. Con otra compra adicional, Valdivia logró controlar el 100%. El poder que tenía Gabriela permitió la venta del resto de acciones. Ahora el periódico ha perdido credibilidad e imparcialidad.

Para Luz Marina ha sido una situación muy dolorosa. No tienes idea de cuán periodista imparcial es. Lo que más le duele a ella es haber perdido el legado de su abuelo, que es Los Tiempos, que ama. Ella se ha criado ahí. Tenía cinco años y estaba en la rotativa con su abuelo a las cinco de la mañana. Tiene un gran amor por el periodismo. Y ahora Los Tiempos se ha perdido.

BD/RPU