Un plan por más de 1.800 millones de dólares para ayudar a convertir 23 ciudades de Asia, África y América Latina en urbes eficientes, inclusivas y resilientes al cambio climático, fue lanzado con respaldo del Pnuma y el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF Bolden inglés).
Vista de Lima, urbe en constante crecimiento. Foto: Foto: Franz Mahr/BM
Nairobi (IPS)
Un plan por más de 1.800 millones de dólares para ayudar a convertir 23 ciudades de Asia, África y América Latina en urbes eficientes, inclusivas y resilientes al cambio climático, fue lanzado con respaldo del Pnuma y el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (GEF Bolden inglés).
Las ciudades “están en la primera línea de la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad, y la contaminación”, dijo Inger Andersen, directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).
“Pero también tienen el poder de abordar estos desafíos al tiempo que aumentan la resiliencia de sus ciudadanos y su infraestructura”, agregó la responsable.
El plan, UrbanShift (Cambio urbano), expone que se apoyará a 23 ciudades en Argentina, Brasil, China, Costa Rica, India, Indonesia, Marruecos, Ruanda y Sierra Leona para “adoptar enfoques integrados de desarrollo urbano que ayuden a dar forma a ciudades eficientes, resilientes e inclusivas”.
El GEF colocará 148 millones de dólares y otros 1700 millones provendrán de cofinanciamiento para promover enfoques de desarrollo integrados, como soluciones basadas en la naturaleza, sistemas de transporte público con bajas emisiones de carbono, zonas de bajas emisiones y gestión integrada de residuos.
“Las ciudades están en la primera línea de la triple crisis planetaria del cambio climático, la pérdida de biodiversidad, y la contaminación. Pero también tienen el poder de abordar estos desafíos al tiempo que aumentan la resiliencia de sus ciudadanos y su infraestructura”:Inger Andersen.
Las ciudades, que albergan 4200 millones de personas, más de la mitad de los 7800 millones de habitantes del planeta, son responsables de alrededor de 70 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero, causantes del calentamiento global.
Para 2050, mientras crecen para albergar a 70 por ciento de la población mundial, deben volverse neutrales en carbono (retirar la misma cantidad de CO2 que se arroja a la atmósfera), como pauta el Acuerdo de París adoptado en 2015 por 193 países.
Según ese acuerdo, la temperatura global no debería aumentar más de 1,5 grados centígrados sobre los niveles preindustriales (1850-1900).
En paralelo, las ciudades enfrentan desafíos crecientes, desde inundaciones, tormentas y olas de calor provocadas por la crisis climática, hasta una calidad del aire peligrosa, falta de viviendas asequibles y profundas divisiones sociales.
Los objetivos de UrbanShift incluyen evitar más de 130 millones de toneladas de emisiones de CO2 equivalente, una cantidad equiparable a las emisiones de 32 centrales eléctricas de carbón durante un año.
UrbanShift también prevé mejorar la gestión y restauración de aproximadamente un millón de hectáreas de tierra, y en general impactar las condiciones de vida de unos 58 millones de personas en las 23 ciudades.
El programa involucrará a alcaldes, el sector privado, redes de ciudades, agencias de las Naciones Unidas, bancos multilaterales de desarrollo y otros socios para apoyar a los gobiernos nacionales y municipales.
También trabaja en la construcción de una plataforma de conocimiento y aprendizaje para conectar ciudades con experiencia global e investigación de vanguardia, además de ofrecer un espacio para compartir experiencias y forjar alianzas.
“En un mundo urbano cada vez más invasivo, invertir en nuestras ciudades es una de las mejores formas para lograr beneficios ambientales globales en todos los sectores”, apuntó Carlos Manuel Rodríguez, presidente del GEF.
Esos sectores abarcan “desde la conservación de la biodiversidad hasta la reducción de las emisiones de carbono y el aumento de la resiliencia frente a impactos como los eventos climáticos y las pandemias”, agregó Rodríguez.
Andersen sostuvo que “debemos reorientar el ingenio y la laboriosidad que mostramos al construir nuestras ciudades en primer lugar para repensar su funcionamiento. UrbanShift será una herramienta clave para ayudar a los líderes urbanos a hacer precisamente eso”.
A-E/HM