Cox anuncia el despliegue de agentes de inteligencia para evitar una "convulsión"

Brújula Digital |05|10|2021|

El Gobierno desplegará a personal de inteligencia de la Policía para husmear los planes de las organizaciones cívicas y plataformas ciudadanas en las movilizaciones previstas para el 10 y 11 en contra de la persecución política.

"Vamos a estar muy alertas, una diferencia con relación a 2019, es que nuestro Ministerio de Gobierno está preparado con todo lo que va ser información, nosotros ya conocemos sus manuales de operación de todos los que quieren generar violencia" afirmó ayer el viceministro de Régimen Interior Nelson Cox.

“Nuestro Ministerio de Gobierno va a tomar los recaudos necesarios para coordinar, como corresponde, con los comandos departamentales, coordinar con el personal de Inteligencia para identificar a las personas que están intentando generar situaciones de violencia, situaciones de convulsión y en función de eso buscar la tranquilidad mayor” también dijo Cox en declaraciones a la radio Patria Nueva, según cita la agencia ABI.

Los comités cívicos y el Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade) determinaron el viernes una marcha de protesta para el 10 de octubre y un paro cívico para el 11 de octubre en contra de la persecución política del gobierno de Luis Arce Catacora.

Estas movilizaciones encendieron las alarmas en el Gobierno hasta el extremo, según Cox, de munirse de los "manuales de la derecha". "A esos comités cívicos les hacemos saber que ya sabemos cómo se mueven (…). No vamos a permitir que quieran convulsionar Bolivia” advirtió.

Según dijo, los cívicos pretenden ejecutar un "golpe de Estado" contra Luis Arce y que para evitar este hecho los comandos departamentales de la Policía estarán en alerta y "observancia" permanente.

La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, calificó de "sin sentido" el paro de los cívicos. "No tiene argumentos, no tiene justificación. Es un paro que está buscando más intereses políticos de un sector de la población que quiere una impunidad (por el "golpe de Estado") afirmó la autoridad en declaraciones a Bolivia TV.

Indicó que el país está en un proceso de reactivación económica en medio de la pandemia por la Covid-19 y que el pueblo necesita trabajar porque la suspensión de actividades provocaría la pérdida de más de 100 millones de dólares por día.

“Todos estamos buscando la reactivación económica, el tema del poder sentarnos, el poder trabajar de manera coordinada, así que nos parece un paro sin argumentos que busca una desestabilización, que no está pensando en los bolivianos, en las bolivianas, porque sí estamos trabajando y eso es lo que vamos a sostener”, afirmó.

El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, consideró que el paro del 11 de octubre "es para destruir este trabajo de reconstrucción de economía que estamos realizando como Gobierno, bajo el liderazgo de nuestro presidente Luis Arce (…). Estos paros son para ponerle zancadillas, estos paros son para sabotear al Gobierno”, afirmó en Bolivia TV.

La autoridad pidió a la población que reflexione y no sea parte de lo que sería un "sabotaje" y "boicot" a la gestión de Arce.

BD