La Central Obrera Boliviana (COB), en el ampliado nacional realizado en La Paz, resolvió conformar la esperada comisión de poderes, instancia encargada de convocar al XVIII Congreso Nacional Ordinario en un plazo de 90 días.
Brújula Digital l29l05l25l
La Central Obrera Boliviana (COB), en el ampliado nacional realizado en La Paz, resolvió conformar la esperada comisión de poderes, instancia encargada de convocar al XVIII Congreso Nacional Ordinario en un plazo de 90 días. El objetivo que tendrá es elegir una nueva directiva que ponga fin a la gestión de Juan Carlos Huarachi, secretario ejecutivo desde 2018.
La decisión fue celebrada por varios sectores, especialmente por la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, que desde marzo venía exigiendo la realización del ampliado y la reactivación del proceso congresal.
“En 90 días vamos a tener un nuevo directorio de la COB que esté verdaderamente al servicio de todos los trabajadores”, afirmó Roberto Ángel Pereira, delegado de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB), quien destacó que este avance representa el inicio de una nueva etapa para el ente matriz de los trabajadores.
El mandato de Huarachi, que inicialmente debía durar solo dos años, se fue extendiendo sucesivamente a lo largo de tres gobiernos: fue electo en febrero de 2018 con el aval de Evo Morales, reelecto en 2020 durante la presidencia de Jeanine Áñez, y ratificado nuevamente en 2022 con apoyo del presidente Luis Arce. En enero de 2024, otro ampliado —sin las atribuciones necesarias— le permitió continuar en el cargo, desatando nuevas críticas sobre su prolongada permanencia en la dirigencia.
Las organizaciones afiliadas denunciaron reiteradamente que la conducción de la COB se volvió complaciente con el poder político, debilitando su rol crítico frente a las decisiones del Gobierno. “La resolución del ampliado responde a la presión legítima de las bases, que demandan una dirigencia independiente, coherente y verdaderamente comprometida con los intereses de la clase trabajadora”, enfatizó Pereira.
El ampliado también definió que el próximo congreso debe realizarse en la ciudad de La Paz, rechazando la posibilidad de trasladarlo a distritos alejados como en anteriores gestiones, cuando se buscó dificultar la participación de las bases para evitar la renovación de la dirigencia.
Huarachi, por su parte, intentó justificar su permanencia en el cargo afirmando que fue una decisión “orgánica” de las organizaciones afiliadas. No obstante, reconoció que a partir de ahora la comisión de poderes será la encargada de coordinar y ejecutar la organización del Congreso Ordinario.
Además de la renovación de la dirigencia, el ampliado incluyó entre sus resoluciones una exigencia al Gobierno para sostener una reunión sobre la crisis económica del país, reflejando la necesidad de una COB que recupere su capacidad de interlocución real frente al Estado.
BD/RED