La legisladora Fanny Mamani se negó a dar nombres porque “los chismes son de alcahuetes”. “Basta mi palabra, no le voy a decir quién, porque tengo el derecho a guardar silencio, ¿no? Hasta en una demanda, hasta el mismo (acusado) tiene derecho a guardar silencio”.
Brújula Digital|1|03|24
La diputada del Movimiento Al Socialismo del ala evista Fanny Mamani reconoció hoy que le “ofrecieron un cargo” a cambio de que votara a favor de los proyectos de ley de créditos externos que se tratan en la Cámara de Diputados.
Dijo que tomó “como un chiste, como una burla” la propuesta.
“(Me han ofrecido) un cargo, pero yo no lo he aceptado, tampoco lo he tomado, yo lo he tomado como un chiste o como una burla que se hace, ¿no?”.
La pega, supone Mamani, era para que ella pudiera dársela a alguno de sus allegados.
La diputada, pese a la insistencia de los medios de comunicación, no quiso informar quién le hizo el ofrecimiento.
“No me gusta hablar los nombres, ¿saben por qué? Porque mi papá decía, una palabra que siempre me la tengo, los chismes son de los alcahuetes, me decía”.
Dijo que si daba a conocer el nombre traería más problemas “y en Bolivia ya estamos bastante de problemas para poder yo generar otro problemita más”.
Cuando un periodista le dijo que ella misma alimentaba el chisme con su denuncia sin dar el nombre, reiteró que le ofrecieron una pega, pero dijo que bastaba su palabra para sustentar sus declaraciones.
“Basta mi palabra, no le voy a decir quién, porque tengo el derecho a guardar silencio, ¿no? Hasta en una demanda, hasta el mismo (acusado) tiene derecho a guardar silencio”.
Dijo que para la corrupción no hay pruebas.
Legisladores de oposición han denunciado en el transcurso de la mañana que el Movimiento Al Socialismo ha comprado conciencias para conseguir la aprobación de los proyectos de ley de créditos externos que en estos momentos se tratan en la Cámara Baja.
BD/JA
