Al menos 64 personas han perdido la vida en las inundaciones más graves que han afectado a España en 30 años.
Brújula Digital|Agencias|30|10|24
Al menos 64 personas han perdido la vida en las inundaciones más graves que han afectado a España en 30 años, después de que lluvias torrenciales azotaran la región oriental de Valencia el martes, sumergiendo carreteras y localidades en agua, informaron las autoridades locales el miércoles.
Rescatistas en lanchas trabajaron en la oscuridad para explorar las aguas inundadas, llevando a varias personas a un lugar seguro, según mostraron las imágenes de televisión desde el municipio de Utiel. Los servicios de emergencia continuaban esforzándose por llegar a las áreas más afectadas, afirma Reuters.
"Para aquellos que todavía están buscando a sus seres queridos, toda España llora con ustedes", dijo el primer ministro Pedro Sánchez en un mensaje televisado, prometiendo "reconstruir sus calles, plazas y puentes".
Al menos 62 personas murieron en Valencia, mientras que en la región central de Castilla La Mancha, las autoridades reportaron dos muertes y varios desaparecidos debido a la tormenta.
Los trenes hacia Madrid y Barcelona fueron cancelados por las inundaciones, y las escuelas y otros servicios esenciales se suspendieron en las áreas más afectadas, informaron las autoridades.
Los servicios de emergencia de la región instaron a la población a evitar viajar por carretera y a seguir las recomendaciones oficiales, y se desplegó una unidad militar especializada en rescates en algunas áreas para ayudar a los servicios locales, según Reuters.
En ciertas localidades de la región, como Turís, Chiva y Buñol, se registraron más de 400 mm de lluvia (15.75 pulgadas), lo que equivale a un año de precipitaciones normales.
Esto llevó a la agencia meteorológica estatal AEMET a emitir una alerta roja el martes. A medida que las lluvias disminuían en esas áreas, la alerta se redujo a nivel naranja; sin embargo, con la tormenta moviéndose hacia el noreste, el servicio meteorológico regional de Cataluña emitió una alerta roja para el área de Barcelona, advirtiendo sobre fuertes vientos y granizo.
El rey Felipe y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, han expresado su solidaridad con las víctimas, mientras que grupos como ASAJA anticipan daños severos en los cultivos, dado que la región afectada representa casi dos tercios de la producción de cítricos en España, reporta Reuters.
Científicos explican que fenómenos de esta magnitud, antes aislados, se han vuelto más frecuentes debido al cambio climático, con el calentamiento del Mediterráneo como uno de los factores que intensifican las lluvias torrenciales y los desastres asociados.
BD/MS