“Hermanas y hermanos, pese a que el mundo se encuentra atravesando un período inflacionario de grandes magnitudes, Bolivia, por el contrario, tiene la tasa de inflación más baja en toda Sudamérica, 1,6 por cierto al mes de julio de 2022”, dijo el Jefe de Estado.
Luis Arce, durante su discurso por los 197 años de la independencia de Bolivia. Foto captura TVB
Brújula Digital |06|08|22|
Durante los actos centrales por los 197 años de la independencia de Bolivia, el presidente Luis Arce, destacó desde la Casa de la Libertad de Sucre, los logros económicos registrados en el país, en medio de un escenario internacional de periodo inflacionario, pero evitó mencionar el incumplimiento del Censo 2022 programado y garantizado para el 16 de noviembre de este año.
Tras hacer una reseña histórica sobre la participación de héroes y heroínas de la independencia, el Primer Mandatario se remontó hasta el año 2006 para destacar avances en materia económica, la que atribuyó al Modelo Económico Social Productivo Comunitario.
Dijo que mientras a nivel internacional se enfrenta a un periodo inflacionario adverso, en Bolivia, la tasa de inflación, apenas llegó al 1,6% durante el primer semestre. “A casi dos años de nuestra gestión estamos saliendo adelante a pesar de un contexto internacional desfavorable (…). Encaminamos a nuestros país a la industrialización”, dijo.
Hizo mención a la pandemia y al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, aunque no precisó que es por la invasión del primero sobre el territorio ucraniano, y pidió respetar la postura de Bolivia respecto a este tema.
“Hermanas y hermanos, pese a que el mundo se encuentra atravesando un período inflacionario de grandes magnitudes, Bolivia, por el contrario, tiene la tasa de inflación más baja en toda Sudamérica, 1,6 por cierto al mes de julio de 2022”, dijo.
Arce, quien invitó al canciller de México, Marcelo Ebrard, a la sesión de honor, aseguró que el modelo implementado en el país logrado generar un escenario de certidumbre, con estabilidad de precios y una economía sólida pese al contexto internacional adverso.
Sin embargo, el Jefe de Estado no mencionó nada sobre el Censo que debió realizarse el 16 de noviembre de este año, y que fue postergado por decisión del Ejecutivo y el Consejo de Autonomías hasta el año 2024, lo cual generó reclamos y protestas de algunas regiones como Santa Cruz.
Anunció que el comité del bicentenario con participación del nivel nacional y subnacional elaboró un plan con miras a los próximos años.
El comité interinstitucional de Santa Cruz advirtió en realizar desde bloqueos hasta movilizaciones de protesta para que el Censo de Población y Vivienda se realice el mes de junio de 2023, debido a que considera que este departamento fue el que más creció demográficamente, producto de las fuertes migraciones internas de gente del occidente en busca de tierras y mejores condiciones de vida.
El Gobierno ha insistido en que el censo es un proceso técnico y no político, y garantizó en varias ocasiones junto con el director del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Humberto Arandia, que había un avance del 90% en la etapa de planificación en la cartografía y la boleta censal, sin embargo terminó el Ejecutivo reconociendo que no habían avances sustanciales.
El gobernador de Santa Cruz, Fernando Camacho, anunció que el departamento realizará su propio censo ante la intransigencia del Gobierno para ejecutar el Censo de Población y Vivienda el 2023.
“Nuestro Instituto Cruceño de Estadísticas (ICE) realizará un levantamiento estadístico para conocer la situación población, el nivel de desempleo, los datos de la salud y educación de nuestro departamento”, anunció el gobernador Luis Fernando Camacho.
El censo permitirá la redistribución de los recursos, además de la ejecución de políticas sociales y económicas diferenciadas de acuerdo a las necesidades de cada región.
Arce afirmó que la pobreza moderada se redujo de 39,0% en 2020 a 36,2% en 2021; mientras, que la pobreza extrema cayó de 13,7% a 11,1% durante el período señalado, mientras que la tasa de desempleo abierto urbano en Bolivia disminuyó de 11,6%, en julio de 2020, a 4,2% en mayo de 2022, es decir que se registró un descenso de 7,4 puntos porcentuales (pp).
Sin embargo, desde el sector privado se ha advertido que el empleo informal; es decir, sin seguro social, aportes a las AFP, jubilación y otros logros sociales, llega al 85%.
BD
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