Después de quedar eliminado de la Copa, el equipo celeste se ha propuesto ganar todo en la Liga, a ver si le alcanza para superar a Always Ready y The Strongest, a fin de ponerse de nuevo la corona.
Brújula Digital, Premium|27|9|25|
Con un triunfo en Oruro sobre Gualberto Villarroel San José (0-2), Bolívar inició este domingo una arremetida que tiene como objetivo alcanzar la punta y retener el título del fútbol boliviano.
Una vez terminada su participación en la Copa Sudamericana por su eliminación en cuartos de final, el equipo celeste se ha propuesto ganar todo en la recta final de la Liga, a ver si con ello le alcanza para ponerse al final de nuevo la corona.
El primer paso lo dio en Oruro para llegar a 43 puntos, todavía por detrás del líder Always Ready (52) y del escolta The Strongest (46), pero a sabiendas de que aún quedan más de 20 puntos en juego como para creer que la remontada es posible.
Superior desde el inicio
Aun con la resaca de la Copa y la dura caída en Belo Horizonte ante el brasileño Atlético Mineiro (1-0), la Academia se presentó en Oruro con la decisión de sumar los tres puntos en juego.
Futbolísticamente no fue un equipo dechado de virtudes, pero colectiva e individualmente lo suficiente como para ser superior a GV San José, que tuvo que rendirse ante la jerarquía de su rival.
Bolívar atacó desde temprano y cada vez con más fortaleza. Damián Batallini y Dorny Romero fueron los primeros en avisar con llegadas peligrosas.
Batallini hizo el primer tanto a la media hora (30’), aunque no fue por una virtud de Bolívar sino por un error del golero de GV San José Bruno Poveda, quien jugando con los pies rechazó mal y le regaló el balón al argentino.
El conjunto orureño hizo bastante poco como para buscar el empate.
Para más
El dominicano Romero estuvo en una tarde nada inspirada. En la segunda parte, fácilmente fueron dos o tres las veces que perdió claras chances de gol.
Es que Bolívar dominaba y no dejaba de poner en jaque a la defensa de GV San José.
Lógicamente la victoria por la mínima diferencia no era ninguna prenda de garantía, como que los celestes se llevaron un susto cuando el árbitro Ivo Méndez cobró penal por mano; sin embargo, el VAR lo llamó para que rectificara.
De paso, GV San José no aprovechó las pocas opciones que tuvo, entonces lo pagó caro.
A los 84’ vino el segundo y a la postre definitivo gol, un contragolpe bien hecho por Jesús Velásquez, Carlos Melgar y Martín Cauteruccio, todos hombres recién ingresados. Finalmente Melgar empujó el balón adentro (0-2).
Bolívar hizo un tercer tanto, que en realidad fue un autogol de Jaime Villamil, a la larga no convalidado por una posición adelantada previa detectada por el videoarbitraje.
Con 30 puntos, GV San José está séptimo y aún con chance de pelear por algún premio.
BD/