BEC_SmartPlay-Viajera-1000x155px
BEC_SmartPlay-Viajera-1000x155px
Brujula-Digital-BancoSol-PDF-Solfestivo-Diciembre-1000x155px-
Brujula-Digital-BancoSol-PDF-Solfestivo-Diciembre-1000x155px-
Cultura | 07/11/2022   07:10

Comentario: Las Figuraciones" de Juan Carlos Salazar

BEC_SmartPlay-Viajera-956x150px (1)
BEC_SmartPlay-Viajera-956x150px (1)

Brújula Digital 

Darwin Pinto Cascán |07|11|22

La literatura siempre me lleva a lugares mejores y extrae de mí una versión que sólo existe con ella. La buena literatura es una experiencia que se prolonga hasta después de haber terminado de leer el libro. Es algo que se queda en uno, como un perfume o "esa" mirada que no se va de la mente por muchos días.

Acabo de terminar de leer el libro de cuentos de Juan Carlos Salazar, Figuraciones, y escribo aprovechando que aún estoy tocado por el eco vivo de cada relato. Para mí el libro como un todo es un bello animal creado por un corazón que ha vivido intensamente y ha encontrado en el uso preciso de las palabras, el modo de darle vida, esencia y nombre.

He disfrutado con todos los sentidos este libro, que aunque no muy extenso, alcanza una maravillosa profundidad en la belleza de cada una de sus historias. Bien escrito, hecho con tinta que sale de la experiencia y de un corazón apasionado por seres y lugares, es una amable criatura, sabia y hermosa.

Cada relato corto es un universo cargado de su propia emoción, de su propio mensaje, de su propio andamiaje. Cada relato tiene cuerpo y tiene alma. Tiene huesos, y amores, y rencores y dolores. Cada uno es un pez único habitando en un océano de 62 páginas.

De las siete historias, me sorprende la transposición del tiempo y el lugar de ¿Acaso crees en Dios?; El retorno a la magia de lo sobrenatural en los campos, en Casilda; lo cíclicas e inevitables que son las fatalidades en El Triste Pizarro; la alegoría de un veneno que hace alucinar a sus mercaderes y a sus consumidores en El santo prestado; o la profunda nostalgia en Aquí vive la muerte. No pude evitar conmoverme profundamente con este cuento, lo cual para mí es una buena señal en lo referente a la factura de la pieza.

En su melodía hay unas pocas notas de Cortázar y tal vez de Rulfo, que sin embargo, no dañan para nada su estilo tan rico en el manejo del lenguaje y tan claro en la clave de sentimiento con el que decide vestir cada historia.

En estos días tan duros para nosotros, leerlo me ha recordado el alto grado de belleza que puede alcanzar la buena literatura cuando se escribe con la honestidad más pura posible: la del corazón.

Darwin Pinto Cascán es periodista y escritor





BRÚJULA-colnatur diciembre-2024 copia
BRÚJULA-colnatur diciembre-2024 copia
AlicorpEffie2024-300x300
AlicorpEffie2024-300x300