El Ladrón de Perros: una ventana a la vida de los lustrabotas paceños y una reflexión profunda sobre la humanidad

Brújula Digital|Agencias|17|10|24

Manuela Sanchez 

La película El Ladrón de Perros se estrena en cines bolivianos el jueves 17 de octubre.

En el panorama cinematográfico boliviano, una nueva producción ha llamado la atención de críticos y espectadores por su enfoque único y profundamente humano: El Ladrón de Perros. 

Bajo la dirección de Vinko Tomičić, esta película no solo narra la historia de un ladrón de perros, sino que explora temas como la familia, la lucha social y el contexto que lleva a las personas a tomar decisiones radicales. 

El actor principal, un lustrabotas paceño llamado Franklin Aro ha ganado Mejor Actor en múltiples premios internacionales. Otros honores han incluido Mejor Película y Mejor Director.

El elenco también incluye actores celebres como Alfredo Castro y Teresa Ruiz. 

Vinko Tomičić y su conexión con los lustrabotas de La Paz

El director y guionista chileno compartió cómo se inspiró para realizar la película en Bolivia. Tras quedar "fascinado" con la comunidad de lustrabotas en La Paz, se dio cuenta de que la realidad que quería retratar solo podía ser plasmada en esa ciudad. “Me quedé impactado y me di cuenta de que la realidad del mundo que yo quería construir acá era verdad y en Chile ya no existía mucho”, comentó. 

Esta conexión con la comunidad lo llevó a establecerse en Bolivia por seis años, donde impartió talleres de cine a los jóvenes lustrabotas a través del periódico El Hormigón Armado.

“Esa decisión cambió mi vida, me fui de Buenos Aires y vine a vivir a La Paz por seis años”, recordó.

El proceso creativo y los retos del rodaje

Álvaro Manzano, productor de la película, recordó cómo conoció a Tomičić en un taller de Ibermedia en La Paz y cómo surgió su colaboración. 

"Dio la casualidad de que Vinko estaba buscando un productor cuando llegó a La Paz, y le hablé y le dije que quería formar parte del proyecto, y él me dijo que sí", comentó Manzano. 

Juntos postularon y ganaron el fondo de desarrollo de Ibermedia, lo que les permitió llevar adelante la producción.

Sin embargo, el proceso no estuvo exento de desafíos, siendo la pandemia uno de los más grandes. 

El rodaje, originalmente programado para febrero de 2020, tuvo que ser suspendido por más de un año: “El principal reto fue que nosotros teníamos el rodaje programado para febrero del 2020, ya estaban los actores y todos acá y tuvimos que suspender el rodaje por un año y medio por la pandemia”, explicó Manzano. 

Aunque finalmente pudieron filmar en 2021, las restricciones seguían presentes, lo que implicó un incremento en el presupuesto destinado a bioseguridad, incluyendo pruebas PCR diarias para todo el equipo.

A pesar de estas dificultades, Manzano destacó que la pandemia les brindó una oportunidad para mejorar el guion y ajustar ciertos aspectos de la película.

“Muchas cosas del guion se tuvieron que cambiar. Pero también fue un reto que nos trajo muchas cosas positivas creativamente. Nos ayudó a darle una vuelta más al guion”, señaló. 

Los momentos de soledad del protagonista, combinados con la ciudad más vacía debido a las restricciones, añadieron un peso emocional adicional a la historia.

Una comunidad que se convirtió en parte de la película

Uno de los aspectos más singulares de El Ladrón de Perros es la participación de los lustrabotas, quienes no solo fueron una fuente de inspiración para Tomičić, sino que también formaron parte del elenco. 

Según Manzano, fue fundamental trabajar con ellos durante años para ganar su confianza. “Se hicieron muchos talleres con ellos durante los años, castings cada seis meses. Yo creo que es la única manera de trabajar con los lustrabotas”, afirmó. 

La relación de confianza mutua que se forjó entre el equipo de producción y los jóvenes fue clave para el éxito de la película. “Ahora nos reconocen y hay una amistad ahí. Se sintieron muy orgullosos y felices, especialmente de Franklin, muchos lo conocían por años”, dijo Manzano, refiriéndose al joven que interpreta al protagonista.

Reflexiones profundas en una historia local

Para Tomičić, El Ladrón de Perros no solo es una película sobre un hecho específico, sino una reflexión sobre temas universales como el amor familiar y las desigualdades sociales. “Los mensajes de la película son infinitos”, comentó el director. 

Al final, tanto Tomičić como Manzano coinciden en que este proyecto no solo ha sido una experiencia cinematográfica, sino un proceso transformador para todos los involucrados, incluidos los actores no profesionales y el equipo de producción boliviano.

Con su estreno próximo, El Ladrón de Perros promete ser más que una historia local; será una ventana a la vida de aquellos que viven en las sombras de las grandes ciudades, con un mensaje profundo sobre la humanidad y las decisiones que tomamos.

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