Mazamorra en Tiquipaya: dragado y reencauce del río Taquiña deben ser permanentes

Brújula Digital|25|02|20|

Las autoridades del departamento de Cochabamba demandaron que en el río Taquiña, que se desbordó el sábado generando una mazamorra que dejó sin viviendas a más de un centenar de familias, permanezca maquinaria pesada realizando trabajos de dragado y limpieza de la cuenca durante la época de lluvia e incluso hasta que se encuentren soluciones definitivas.

“La zona en riesgo es permanente”, informó el secretario Departamental de la Madre Tierra, Alan Lisperguer, porque en la zona “hay todavía un estado de alerta, los trabajos van a continuar” al menos por un par de meses.

Explicó que “hay familias que no quieren salir de sus casas y se está dialogando para convencerlos de la evacuación”. Algunos damnificados insisten en permanecer en sus viviendas en el afán de cuidar sus pertenencias e insisten en que la situación mejorará y que el desastre marcó solo una etapa.

Según informes oficiales, 95 familias fueron damnificadas por la mazamorra que se registró tras el desborde del río Taquiña, además que 25 viviendas sufrieron daños graves y otras 18 fueron inundadas por completo.

Entrega de Bs 7 millones

El ministro de Obras Públicas, Iván Arias, informó el martes que los gobiernos central, departamental y municipal destinaron de manera conjunta siete millones de bolivianos para paliar la emergencia. ¿A qué se destinarán estos fondos? Según Arias al reencauzamiento del río Taquiña y limpieza del área afectada, así como al retiro de piedras y rocas de gran dimensión.

En el cuarto día de emergencia que vive este municipio de Cochabamba 620 militares, 221 policías y bomberos, así como 215 voluntarios, además de los vecinos, realizan tareas de limpieza, de retiro de piedras y rocas, entre otros. Antes del mediodía se prevé la visita de Jeanine Áñez.

Situado a 10 kilómetros de la ciudad de Cochabamba, el municipio de Tiquipaya se enfrenta este martes a su cuarto día de emergencia luego de que el viernes, a las 18:30 y tras el desborde del río Taquiña, una mazamorra arrastrara todo lo que encontró a su paso y dejara piedras, rocas, escombros y lodo que ahora un contingente de militares, policías, voluntarios y vecinos se empeñan en retirar.