María Lindaura y Miranda Lucía son veladas en La Paz y serán enterradas el domingo en Cochabamba

Brújula Digital |9|2|24|

Entre una variedad de flores, donde sobresalen las blancas, se encuentran los féretros de María Lindaura Vega Jaldín y Miranda Lucia Tejada Vega, madre e hija que son veladas este viernes en una funeraria de Miraflores de La Paz, para recibir el adiós de sus amigos. A medianoche sus familiares las trasladarán a Cochabamba para velarlos este sábado y enterrarlos el domingo en el Parque Cementerio Concordia de Cochabamba.

Desde el mediodía de este viernes, vecinos, conocidos, amigos y familiares fueron a despedirse de las dos personas que tras ser reportadas como desaparecidas desde el domingo 4 de febrero, cuatro días después fueron halladas sin vida.

Los vecinos del pasaje Rosasani, en Obrajes llegaron hasta la Funeraria Resplandor, de la zona de Miraflores para despedirse de la madre e hija y entre lamentos coincidieron en señalar que “eran educadas, solidarias y emprendedoras”, según testimonios tomados por canales de televisión.

Los compañeros de universidad de Miranda la recuerdan como una alumna brillante, alegre y con muchas ganas de triunfar. “Truncaron un brillante futuro, los asesinos no merecen perdón, la justicia debiera encerrarlos de por vida”, dijo una de sus amigas.

Los arreglos florales llenaron el salón velatorio, los pocos familiares que llegaron desde la ciudad de Cochabamba agradecieron el cariño a la madre e hija, aprovecharon en informar que a la medianoche trasladarán los dos féretros a la ciudad de Cochabamba.

Katerini Vega, sobrina de María Lindaura, informó que “la película de terror no termina” y anunció que este sábado serán veladas en el salón velatorio Concordia de Cochabamba, el domingo serán enterradas en el Parque Cementerio Concordia.

María Lindaura y Miranda Tejada, madre e hija que fueron reportadas como desaparecidas desde el domingo, fueron asesinadas por su inquilino Gabriel E.M.R., quien con ayuda del albañil Wilfredo S.S. y su hermano José L.S. perpetraron el crimen que había sido planeado desde octubre del año pasado por una deuda de anticrético.

Según el informe policial, el anticresista planificó desde octubre de 2023 el asesinato de María Lindaura, propietaria de la casa que habitaba el asesino en calidad de anticrético, por 51.000 dólares, desde 2014. La última vez que vieron a las víctimas fue el 4 de febrero, a las 17:00.

RBD/WPS