Compatriotas que llegaron por Pisiga no presentan síntomas del Covid-19, vecinos de La Paz y Cochabamba rechazan su llegada

Brújula Digital|24|03|20|

El ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Iván Arias, informó que los más de 300 compatriotas bolivianos que ingresaron al país por Pisiga, población fronteriza entre Bolivia y Chile, no presentaban síntomas del Covid-19 luego de realizarles los controles de bioseguridad correspondientes.

“Al entrar a Bolivia y al subir a los buses se les hizo el control de bioseguridad, y también al llegar a las ciudades, todas las personas son asintomáticas, no tenemos ninguna persona con síntomas, pero por eso se hace la cuarentena. Si en este o en otro punto fronterizo hay alguien con síntomas, es traspasado a un centro médico”, manifestó la autoridad a un medio de comunicación local.

Este grupo de más de 300 personas que arribaron el pasado fin de semana a territorio nacional fue trasladado posteriormente a Cochabamba, Chuquisaca y La Paz, donde deben cumplir los 14 días de aislamiento para garantizar que están libres del coronavirus.

Por este tema, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, aseveró que las personas en cuarentena deben cumplir la misma y no intentar fugarse, pues de lo contrario serán remitidas a la cárcel luego de cumplir su respectiva cuarentena, pues no pueden poner en riesgo la salud de la población.

El ministro Arias adelantó que otro grupo de personas llegará en las próximas horas a Pisiga y se las  recibirá con las medidas preventivas necesarias. “Hoy iremos a Pisiga porque está llegando otro contingente de compatriotas, hay seis flotas que están al otro lado de la frontera, ponga 50 personas por flota y la gente está viniendo de Chile porque el coronavirus se está expandiendo allá, la gente está escapando a Bolivia y la moneda se ha derrumbado y la gente está empezando a despedir a muchos trabajadores”, manifestó Arias.

El ministro de Obras Públicas indicó que Pisiga no tiene todas las condiciones para acoger en cuarentena a todos esos compatriotas que regresan al país, además que esta situación fue rechazada por los pobladores por el riesgo de contagio, “en Pisiga no hay las condiciones, hay una escuela que no tiene alcantarillado, un coliseo que no tiene agua potable”

La autoridad de Estado señaló que, a pesar del cierre de las fronteras dispuesto por el Gobierno nacional en los últimos días, “a los bolivianos no les podemos decir que no pueden entrar al país, así vengan de un país donde hay contagio”.

Llegada y aislamiento de repatriados genera susceptibilidad

Desde el pasado sábado hasta este martes, un total de 487 ciudadanos bolivianos ingresaron al nuestro territorio desde países limítrofes, pero en las últimas horas se generó susceptibilidad y alarma de vecinos que habitan alrededor de los lugares de aislamiento

Los compatriotas que ingresaron al país por Pisiga y fueron llevados a diferentes departamentos, de acuerdo con su región de origen, generaron dificultades en La Paz y Cochabamba donde los vecinos se alarmaron y manifestaron sus reclamos.

Vecinos de Cochabamba en vigilia por llegada de repatriados

En Cochabamba, los repatriados fueron llevados a las instalaciones de la Villa Olímpica. En el lugar los vecinos del sector se movilizaron para expresar su descontento e incluso instalaron una vigilia. La Policía debió desplegar personal antimotines al sector.

Desde el interior de la Villa Olímpica, los repatriados, a gritos, expresaron su angustia por el encierro y denunciaron que no habían comido. “Papi, sácame de aquí”, decía uno de los pedidos.

Un efectivo militar encargado del operativo, que se identificó como general Cuéllar, fue el encargado de explicar a los pobladores la situación, según reporte de radio Kancha Parlaspa de la Red ERBOL.

Los vecinos reclamaron que no se les hayan avisado sobre la llegada de los repatriados. El militar les indicó que esas personas no están infectadas con coronavirus, pero por protocolo deben ser sometidas a exámenes. Asimismo, señaló a los pobladores que los repatriados sólo se quedarían una noche en la Villa Olímpica y mañana serían despachados a sus casas.

Los vecinos aceptaron que mañana se retire a los repatriados, pero advirtieron que habría una vigilia para garantizar aquello.

El general Cuéllar aclaró que 155 personas fueron llevadas a la Villa Olímpica y que, incluso, más de 50 se irían en las próximas horas a Santa Cruz En ese marco, pidió a los vecinos que se permita el ingreso de transporte y de comida para abastecer a los repatriados.

Vecinos de La Paz reclaman por presencia de repatriados

En la ciudad de La Paz, la susceptibilidad se generó en la zona Sur, donde vecinos de Alto Següencoma reclamaron por la presencia de los repatriados en la Casa Comunal del sector.

Los vecinos sostuvieron, en horas de la mañana, que no había las medidas de seguridad necesarias para tener los repatriados en ese lugar, el que además es contiguo a un mercado.

El ministro Núñez repudió los actos de personas que están dificultando el transporte de los repatriados y agreden a los policías que los acompañan. Recalcó que esas personas fueron sometidas a los protocolos internacionales.

Especificó que 82 bolivianos fueron repatriados en vuelo chárter desde Lima, Perú; 45 entraron a través de Puerto Quijarro en la frontera con Brasil; y 360 ingresaron por Pisiga en el límite con Chile.

Sobre la situación presentada en La Paz y Cochabamba, especialistas en epidemiología señalaron que si el gobierno determina los lugares de traslado, es porque se han adoptado todas las medidas preventivas necesarias para que los connacionales que retornaron a su país, cumplan la cuarentena.

Afirmaron que resulta “irracional” se movilicen para impedir la presencia de esas personas “cual si fueran dueños de los ambientes” y pedir que se les comunique sobre el uso de los ambientes seleccionados por las autoridades, en clara actitud de arbitrariedad e incumplimiento a las decisiones de las autoridades, comportamiento que debe ser sancionado de acuerdo a las normas legales vigentes.