La activista de Mujeres Creando indicó que la mujer salía del alojamiento para trabajar como albañil y es por esto que dejaba solo a sus hijos.
Brújula Digital |27|01|25|
La líder de Mujeres Creando, María Galindo, afirmó este lunes que Reyna Huallpa (26), reportada como desaparecida junto a sus dos hijos y encontrada en un alojamiento de La Paz, fue víctima de un "linchamiento social" tras su aprehensión y posterior liberación. Según la activista, la mujer huyó de su hogar porque su pareja intentó abusar de ella.
“En una audiencia se pudo comprobar que jamás simuló su secuestro. Aquí lo que ha habido es una criminalización y una revictimización de una mujer pobre y además a esa criminalización, se ha producido un linchamiento social. Ella no estaba con acceso a redes sociales de saber lo que estaba pasando, porque ella huyó del lugar donde se encontraba porque el hombre intentó violarla”, declaró Galindo a Brújula Digital.
La activista aseguró que una prueba de que Reyna no simuló un secuestro es que se registró en el alojamiento con su cédula de identidad. Durante el tiempo que permaneció allí, trabajaba como ayudante de albañil.
El caso
Reyna fue reportada como desaparecida el 31 de diciembre de 2024 junto a sus dos hijos, de dos y ocho años, y, el martes pasado, fue hallada en un alojamiento de la avenida América, donde también estaban los pequeños. La Fiscalía la acusó de los delitos de simulación de delito, abandono de hogar y violencia familiar y doméstica. Sin embargo, el viernes, recuperó su libertad al no encontrarse suficientes indicios de que hubiera abandonado su hogar.
Galindo también criticó al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, por mostrar a Reyna en una conferencia de prensa y cuestionar que los niños estuvieran solos en el alojamiento mientras su madre trabajaba.
“Segunda cosa, pregunta al ministro Castillo misógino profesional, ¿qué puede hacer una mujer madre, pobre, que no puede contratar una niñera, que no puede contratar una guardería, que no puede contratar un cuarto de alquiler? La compañera ganaba diario como ayudando de albañilería, intentó llevar a sus wawas a su fuente laboral, pero corrían riesgo de vida y se cansaban demasiado, por lo que dejaba a la menor al cuidado del mayor ¿cuántas mujeres bolivianas no se ven obligadas a hacer eso?”, señaló Galindo.
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