Esta obra que data de 1978, ilustra la figura de un “aparapita” de una serie de pinturas que tenía Arnal dedicadas al cargador aymara
Brújula Digital|15|08|24|
Alissya Guerrero
La pintura “Segundo Umbral” del artista boliviano Enrique Arnal fue incorporada a la colección permanente del Museo de Arte Moderno (MoMA) en Nueva York, un hito significativo para el arte boliviano en el ámbito internacional.
Esta obra, que data de 1978, ilustra la figura de un “aparapita” de una serie de pinturas que tenía dedicadas al cargador aymara.
En una entrevista con Brújula Digital, Matías Arnal, hijo del reconocido pintor, comentó que la pieza fue adquirida inicialmente por el Container Corporation of America, una entidad conocida por su vasta colección de arte. Posteriormente, la obra fue donada al MoMA por esta corporación.
Enrique Arnal, artista boliviano nacido en Catavi, Potosí, en 1932 y fallecido en Washington, EE.UU., en abril de 2016, comenzó a pintar a sus 22 años. Su primera exposición individual tuvo lugar en Cuzco, Perú, en 1954. A lo largo de su carrera, Arnal expuso en galerías de ciudades como Buenos Aires, Washington, Caracas, Bonn, Montevideo y otras. Además, dirigió la Galería ‘Arca’ en La Paz entre 1968 y 1970.
Matías indicó que, cuando su padre se enfermó de cáncer en 2015, realizó numerosas gestiones con instituciones de arte, incluyendo MoMA, Reina Sofía y varias otras, para que incluyeran una obra de su padre en sus colecciones. Lamentablemente, en ese momento no se logró. Sin embargo, siempre fue una meta.
“Yo estaba con amigos. Me preguntaron quién era mi padre y yo les dije que era un artista boliviano. Puse en Google ‘Enrique Arnal’ para entrar a la página web de mi padre, pero vi que había un enlace al MoMA, y entonces nos dimos cuenta de que esta corporación americana había donado su obra al MoMA”, dijo Matías, al comentar cómo se enteró que la obra de su padre llegó a esta reconocida galería de arte.
Arnal creó más de 1,200 obras a lo largo de su carrera. Su principal inspiración fue Bolivia, y aunque sus obras evolucionaron con el tiempo, siempre mantuvo una base en la pintura figurativa.
“Lo que siempre me mencionaba mi padre era que lo que él quería reflejar de su arte era el que sea de lo local a lo universal, que sea arte que pueda ser digerido por un público, como el que va al MoMA”, añadió Matías.
Arnal, cuyo padre trabajaba como administrador en una mina en Potosí y cuya madre pintaba principalmente como pasatiempo, decidió estudiar arquitectura en Chile. Sin embargo, a mitad de carrera se dio cuenta de que su verdadera pasión era la pintura. Decidió convertirla en su profesión, inicialmente de manera autodidacta. Debido a su potencial, consiguió becas y estudió en la Ciudad Internacional de las Artes de París, Francia, en 1996.
“En realidad, él estudió en Chile, donde estaba otro artista boliviano, Fernando Montes, quien tenía un estudio de arte. Luego, mi padre empezó a pintar con él en su estudio, y ahí es donde adquirió más amor por la pintura y se dio cuenta de que eso era lo que él quería hacer”, comenta Matías.
Su amor por el arte le llevó a obtener reconocimientos como el Gran Premio en pintura del Salón Murillo con la obra ‘Zampoñas y charangos’ (LP, 1955); Segundo Premio en pintura del Salón Murillo con la obra ‘Paisaje con luna’ (LP, 1957); Primer Premio en pintura del Salón Murillo con la obra ‘Mujer’ (LP, 1958); Primer Premio en dibujo del Salón Murillo con la obra ‘Gallo’ (LP, 1961); Primer Premio de la UTO (Oruro, 1965); Premio ‘A la obra de vida’ del Salón Murillo (LP, 2007).
Matías, el único hijo varón de los cinco hijos de Arnal, recuerda cuando su padre lo llevó a unas clases de arte impartidas por el también artista boliviano Keiko González. Salió muy entusiasmado, diciéndole a su papá cuánto le había gustado. Sin embargo, Arnal le aconsejó que “nunca lo hiciera como profesión; si quería hacerlo, que lo hiciera como hobby, porque él, habiendo vivido la experiencia de ser artista en Bolivia, consideraba que era una profesión bastante difícil y dura, incluso para alguien ya destacado en el mundo del arte”.
El 14 de noviembre se realizará la presentación de un libro sobre la vida y el arte de Enrique Arnal en el Museo de Arte de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington. El evento destacará la trayectoria del pintor boliviano y ofrecerá una visión detallada de su contribución al arte, celebrando su legado a través de la publicación.
BD/AGT