Área avasallada en Santa Rita. Foto: Anapo
Brújula
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Este jueves, la Policía llevó adelante el desalojo de tres predios productivos que fueron tomados en la provincia Guarayos de Santa Cruz, liberó a las víctimas retenidas en el lugar y aprehendió a 28 personas implicadas en el hecho, una de ellas con antecedentes de narcotráfico.
“Logramos la aprehensión de un total de 28 personas que fueron trasladadas hasta la ciudad de Santa Cruz. El operativo lo llevamos adelante tras la denuncia del 10 de julio. Se nos dificultó el ingreso al predio denominado Santa Rita porque los avasalladores destruyeron y quemaron un puente de acceso a la zona”, declaró el comandante departamental de la Policía de Santa Cruz, coronel Erik Holgín.
El operativo también permitió la liberación de tres víctimas, quienes quedaron cautivas por los violentos avasalladores. No pudieron salir de estos terrenos desde el pasado 17 de junio, día en la que una turba, con armas de fuego, machetes y palos, irrumpieron en las propiedades.
“Tomamos el conocimiento que habían personas secuestradas y privadas de su libertad acción que motiva que la Policía boliviana que se encontraba en el lugar realice la negociación correspondiente con los avasalladores. Esta negociación nos permite rescatarlos a los tres; los mismos que a evaluación médica estaban policontusos pero ninguno tenía lesiones que comprometan su vida o sean graves”, agregó el jefe policial.
El operativo contó con un contingente de 300 uniformados que luego fueron reforzados por otros 200 policías quienes ingresaron hasta el predio Santa Rita. “Ahora se están realizando operaciones policiales destinadas a desalojar a estas personas y recuperar dichos predios”, agregó Holguín la tarde de este jueves
En el operativo se logró secuestrar machetes, ondas que eran empleadas para agredir a los Policías, un sistema de comunicación, linternas y cadenas. “De todos los aprehendidos, una persona tiene antecedentes policiales por delitos de narcotráfico”, afirmó el oficial de la Policía.
Una de las víctimas que quedó secuestrada por casi tres semanas dijo que el pasado 17 de junio terminaba de sembrar cuando la turba de avasalladores violentos irrumpió en el lugar. Les prohibieron mover cualquier cosa y todo quedó encerrado. Les hicieron deshacer el campamento que tenían y que no toquen nada. De lo contrario les iban a agredir.
Las personas secuestradas quedaron incomunicadas sin la posibilidad de denunciar la toma del predio. Uno de ellos logró salir en busca de comida pero siempre bajo la atenta vigilancia de los avasalladores. La Policía se enteró de la toma de los predios este miércoles 10 de julio e inmediatamente llevó adelante el operativo de rescate.
BD/LE