El fiscal departamental de Oruro señaló que testigos indicaron que los organizadores dieron 10 entradas a cada alumno para que las vendieran en Bs 30 cada una.
Brújula Digital|29|09|25|
La Fiscalía de Oruro amplió la investigación sobre lo ocurrido en el “Festi Saracho”, festival escolar en el que murieron dos jóvenes a causa de avalanchas humanas, y exigió la entrega de la recaudación del evento para establecer la cantidad de entradas vendidas.
El festival se realizó el domingo 21 de septiembre en el colegio Juan Misael Saracho de Oruro, que estaba atiborrado de personas. Debido a la gran afluencia de público se produjeron dos avalanchas humanas. Una joven de 18 años murió ese día y su prima de 15 quedó en coma; falleció el jueves pasado.
A las investigaciones por homicidio y lesiones culposas se sumaron delitos de corrupción pública, entre ellos uso indebido de bienes del Estado y tráfico de influencias.
“El Ministerio Público también ha requerido que esos fondos sean remitidos a la Fiscalía a efecto también de verificar cuántas entradas se han vendido. De información de testigos tenemos que la entrada costaba 30 bolivianos, que a cada alumno le habían dado 10 entradas a efecto de que proceda la venta”, informó el fiscal departamental, Aldo Morales.
La autoridad añadió que el día del evento las entradas se comercializaron hasta en 50 bolivianos en la puerta, justo cuando comenzaba la presentación del grupo Sangre Cumbiera.
“Son aspectos que van a ser verificados. Afortunadamente tenemos videos tanto de la parte externa como también de la parte interna, que es una verdad material que nadie puede negar con referencia a los hechos que han ocurrido”, afirmó Morales.
Según la Fiscalía de Oruro, la capacidad del lugar fue excedida entre un 200% y 300%, lo que generó una situación de alto riesgo.
Profesores del colegio Juan Misael Saracho, padres de familia y funcionarios de la Alcaldía de Oruro serán convocados a declarar.
“Buscamos esclarecer la verdad material. Nadie puede quedar al margen de la responsabilidad”, advirtió Morales.
El evento no contaba con autorización de la Dirección Distrital de Educación de Oruro; sin embargo, un funcionario municipal otorgó el permiso.
La semana pasada, el vocalista del grupo Sangre Cumbiera y la directora del establecimiento fueron aprehendidos. Tras la audiencia de medidas cautelares, el artista quedó en libertad y la profesora recibió detención domiciliaria con derecho al trabajo.
BD/AGT/JA