Tras la quema de 66 buses PumaKatari el 10 de noviembre del año pasado, Bernardo Bravo Casso escribió un tercer poema.
Bernardo Bravo Casso es chuquisaqueño de nacimiento. Foto: GAMLP
Don Bernardo Bravo Casso es chuquisaqueño de nacimiento pero vive en La Paz hace 40 años y está enamorado de esta ciudad. Como habitante del barrio de Alto Obrajes, uno de sus mayores anhelos fue el de contar con el servicio de La Paz BUS, por lo que manifestó su deseo a través de un poema denominado “Canto al PumaKatari”.
Ese deseo se cumplió el 28 de agosto de 2016 cuando se inauguró la ruta Irpavi II que circula por su zona. Inspirado por lo que él considera un servicio “maravilloso”, don Bernardo escribió un segundo poema donde reflejaba la alegría ciudadana expresada en el uso del servicio a lo largo de sus cinco años de funcionamiento.
Y ahora, tras la quema de 66 buses PumaKatari el 10 de noviembre del año pasado, escribió un tercer poema, esta vez para denunciar cómo un “grupo de desalmados” cometieron este delito y cómo, con el apoyo de la ciudadanía, el servicio de los buses volvió a las calles el pasado 7 de diciembre.
De eso habla el tercer poema de don Bernardo, quien tituló a su obra “Retorno Feliz”. “El servicio que presta esta empresa es realmente maravilloso y la locomoción es lo más importante para el ser humano. De ahí que yo, inspirado en esa situación, empecé con el poema Canto al PumaKatari. En ese poema ya pedía yo que ojalá esto se expanda mucho más, cosa que realmente sucedió. Primero el barrio en el que vivía yo en Alto Obrajes y luego el resto de los barrios de la ciudad”, señaló don Bernardo.
Un pedido al Alcalde
Para este profesor jubilado de la Escuela Normal Superior Simón Bolívar, la ciudadanía paceña está encantada por el PumaKatari, dado que es un servicio utilizado por niños, jóvenes y adultos mayores.
Por eso, cuando se inauguró la ruta Irpavi II y tuvo la oportunidad de hablar con el Alcalde Luis Revilla, don Bernardo le hizo una petición.
“Después de la feliz llegada al barrio de Alto Obrajes, yo violentamente pude verlo al señor alcalde y le dije ´Lucho, es necesario llegar al resto de la ciudad`. Claro que él ya tenía pensado eso, pero parece que incidió en algo mi pedido”, señaló.
El momento trágico
La quema de los 66 buses PumaKatari y los destrozos producidos a las instalaciones de La Paz BUS el pasado 10 de noviembre, son catalogados por don Bernardo como un “momento trágico”, ya que – en su criterio- el daño producido no solo ha sido a la Alcaldía, sino a toda la ciudadanía que usa el servicio.
“Lamentablemente llega este momento trágico en el cual queman y destrozan a tantos vehículos. Quienes han hecho esto no solamente han hecho daño a la Alcaldía, más han hecho daño a la gente humilde que utiliza este servicio porque hay barrios a los cuales no llega la movilidad común y el PumaKatari sí llega a determinadas horas, las cuales uno espera con confianza. En cambio, los otros vehículos no se sabe cuándo llegan y uno espera horas y horas, cosa que con el PumaKatari eso se ha perdido”, reflexionó.
Por eso, a raíz de estos acontecimientos, don Bernardo Bravo decidió escribir un poema que denuncia el hecho y se regocija en la rehabilitación del servicio.
“Sin tapujos de ninguna naturaleza, quiera Dios que esto no suceda más y piensen quienes habitan nuestra ciudad, que hagan las cosas con honestidad. Que el trabajo siempre sea honesto y fructífero”, solicitó.
Don Bernardo Bravo Casso tiene 80 años de vida. Hace 40 años que radica en La Paz donde trabajó como profesor de primaria y docente de la Escuela Normal Superior Simón Bolívar. También se dedicó al teatro.
Hace 18 años se jubiló y ahora se dedica a escribir textos y poemas. Una de sus mayores satisfacciones es ver cómo sus alumnos, a quienes educó durante años, ahora se desenvuelven positivamente como profesores.Como asiduo usuario del PumaKatari le ha tocado conocer todas las rutas del servicio lo que, a su vez, le ha permitido descubrir rincones de la ciudad de La Paz que no conocía.
“La verdad que servicio que inauguraban yo estaba allá para conocer, porque uno no conoce toda esta ciudad, es tan grande que hay barrios que uno no los conoce. Gracias al PumaKatari he podido ir de la salida a la llegada (de cada ruta), así que conozco todas las rutas del bus”, refirió.
El costo es una de las cualidades que más pondera, puesto que con solo Bs. 1.50 puede dirigirse a su destino, pasear y luego “retomar a casa con confianza”, dado que el servicio funciona las 24 horas del día.
Al cierre de la conversación, don Bernardo señala que la motivación para redactar sus escritos está afincada en el hecho de que se “debe despertar del letargo” en el que muchas veces caemos y hacer un viraje en nuestra forma de comportarnos, puesto que no se puede hacer daño al prójimo.
“Jamás hay que hacer daño a nadie, ni al prójimo, peor a las instituciones porque las instituciones son la representación viva de un pueblo que solamente sirven al pueblo en general”, finalizó.
El poema:
Retorno Feliz
Por Bernardo Bravo Casso
La maldad y la envidia destrozaron
Muchas decenas de PumaKataris,
Cuando realizaban su trabajo diligente
Para la población valiente de La Paz.
El momento que menos lo imaginábamos
Surgió la ignorancia perversa
De unos cuantos desalmados
Que en verdad no tienen Patria ni Dios
Privando de esta manera
A que numerosos ciudadanos
Puedan transportarse cómodamente
Dentro de la maravillosa urbe paceña.
Pero más pudo el coraje y la fuerza
Para que después de un breve tiempo,
Las autoridades inteligentes y responsables
Puedan hacer marchar a los buses.
Que la gente alborozada utiliza
Sus prodigiosos y lindos PumaKataris,
Que los llevan siempre alegres
A su destino adorado.
La ignominia jamás vencerá a la honestidad
Y prueba clara de ellos es ahora,
Que los PumaKataris volvieron
Con mucha fuerza y vistosidad.