Tras 16 días de advertencias y protestas, la presidenta Añez llama al diálogo

Brújula Digital |8|8|20|

Tras haber señalado que la convulsión social que vive el país es responsabilidad del Tribunal Supremo Electoral y a 16 días de los primeros anuncios de que se realizarían protestas en el país, la presidenta Jeanine Añez por fin tomó la decisión de llamar a un diálogo para pacificar la situación.

Añez envió una carta este sábado para mantener un “diálogo político nacional” con representantes de Tribunal Supremo Electoral, presidentes de las cámaras de diputados y senadores, candidatos presidenciales y delegados de la Iglesia Católica, para “confirmar la fecha electoral” y la suspensión del bloqueo de carreteras.

“Como Presidenta convoco a un diálogo político nacional para mañana 9 de agosto de 2020 a las 9:00 de la mañana en el palacio de Gobierno”, dice la nota. “El objetivo de este diálogo es confirmar la fecha electoral y suspender los bloqueos que están impidiendo el paso de oxígeno para los pacientes con COVID-19. Y por eso este es un diálogo por la vida”, agrega.

En las últimos dos semanas se han producido protestas y bloqueos organizados por grupos de poder afines al MAS, que han incluido el bloqueo de carreteras, impidiendo el paso de oxígeno para los hospitales, y otras acciones violentas, como haber irrumpido en la localidad de Samaipata, causando desórdenes y atacando a los médicos.

Ni Evo Morales ni ningún otro dirigente del MAS ha realizado alguna crítica a esas acciones o llamado a la pacificación. Por el contrario, Morales, desde su refugio en Buenos Aires, ha alentado mayores conflictos mediante sus usuales mensajes de Twitter.

El problema surgió cuando el TSE aceptó el pedido de diferentes instancias, incluido el gobierno, para posponer los comicios hasta el 18 de octubre. Ello generó la violenta reacción del MAS, pese a que la postergación fue por solo seis semanas. Los grupos masistas dinamitaron cerros para bloquear carreteras, impidieron el paso de ambulancias y otros transportes con implementos médicos.

Durante estas dos semanas, el gobierno se estrelló contra el TSE y acusó a esa entidad de haber provocado la crisis social por el cambio de fecha de los comicios, pese a que la propia Presidenta demandó aquello de manera pública en varias ocasiones. 

Las protestas, además, violan los decretos que obligan a evitar las aglomeraciones precisamente en una época de severa crisis sanitaria.

“La convocatoria este diálogo la hago pensando en la vida pensando en la salud, pensando en la democracia y pensando en la paz social”, concluye la carta de la Presidenta.