La Paz, 03 de octubre de 2023
Evo Morales y Luis Arce en una foto de archico/ABI.
Brújula Digital |17|09|23|
El expresidente Evo Morales acusó al actual presidente, Luis Arce, de “chantajear” a diferentes alcaldes con obras para recibir apoyo, pero olvidando que él hizo lo mismo en 2010 y 2017.
“A los alcaldes chantajean con obras, la semana pasada me decían ‘el 2021 nos han ofrecido una obra, el 2022 otra, el 2023 otra, pero ni una empieza hasta ahora’’, pero el alcalde está chantajeado, si está con Evo va a perder sus obras” señaló Morales este domingo en su programa dominical en radio Kawsachun Coca.
El exmandatario dijo que alcaldes de Beni y Pando le dijeron que se han cansado de tantas promesas.
Morales ejerció el mismo chantaje en dos ocasiones durante su mandato: en 2010, cuando dijo que no trabajará con “candidatos separatistas” y en 2015, cuando expresó que los candidatos a alcaldes y gobernadores opositores no recibirían respaldo del Gobierno si es que resultaban electos en las elecciones de ese año.
“¿Cómo yo puedo trabajar con la ciudad de El Alto con la gente de la derecha? Yo no voy a trabajar (con la derecha), hermanos. Si quieren más obras, ahí está Edgar Patana; si quieren más obras, ahí está Felipa Huanca (candidatos del MAS)”, afirmó Morales poco antes de las elecciones subnacionales del 29 de marzo de 2015.
Tras la ola de críticas recibidas por Morales, el entonces vicepresidente Álvaro García Linera, la ministra de Comunicación, Marianela Paco, y la dirigenta del MAS Leonilda Zurita, defendieron y justificaron al expresidente.
García Linera dijo que las palabras de Morales “no eran un chantaje”, sino una “queja” hacia las autoridades de oposición, que “sólo busca el enfrentamiento, sabotea y dilata obras” contra el derecho de sus poblaciones.
“No es posible trabajar con los opositores, porque los opositores hacen política y politiquería y el Gobierno hace obras”, dijo García Linera.
La ministra Paco expresó que Morales no había chantajeado a nadie, sino “reflexionado” a los opositores. Finalmente, la entonces dirigenta nacional MAS, Leonilda Zurita, extendió la amenaza a todas las regiones donde gane la oposición: “Si la derecha nos gana en cualquier región, no van a tener proyectos”.
El MAS está actualmente dividido entre las facciones arcistas y evistas, que disputan el liderazgo del partido y el derecho a definir el candidato de 2025.
BD/AGT/RPU