En lo que va del año, 20 personas fueron acribilladas, más de la mitad en Santa Cruz

Brújula Digital |12|09|22|

Tres personas fueron acribilladas ayer domingo en San Matías, población cruceña fronteriza con Brasil. Con estos crímenes, suman 20 las personas asesinadas a tiros en lo que va del año, 11 de ellas en el departamento de Santa Cruz.

La mayoría de estos crímenes tiene como móviles, según las hipótesis de la Policía Boliviana, ajustes de cuentas, sobre todo relacionados con el narcotráfico.

De los 11 crímenes que se dieron en el departamento de Santa Cruz, seis se registraron en el municipio de San Matías, frontera con el territorio brasileño.

Cerca de las 07:15 del domingo, fue asesinado a tiros Rosauro Maturana Ramos, cuando se encontraba en las afueras de una carnicería en San Matías. Según información policial, esta persona cuenta con antecedentes delictivos en Brasil. Los atacantes estaban a bordo de un vehículo.

Doce horas más tarde, también fueron acribillados a tiros José David Shriqui Rapp y Fabiano de Souza, ambos se encontraban en un local cercano a la plaza principal de San Matías. Los sicarios también hirieron a una tercera persona, Jhonny Arce, quien fue llevado a un centro médico brasileño.

Los crímenesEl 10 de agosto, el empresario brasileño Vinicius Bernardinelli Dacache, quien se dedicaba al flete de maquinaria, fue asesinado, recibió 11 tiros de arma de fuego. El hecho se registró en una hacienda del municipio de San Matías, provincia Ángel Sandóval.

El 23 de agosto, Alexandro Motta da Silva, de 37 años de edad, fue acribillado en su domicilio de San Matías, delante de su hijo, por sicarios que se dieron a la fuga de una motocicleta, luego de cometer el crimen. El comandante del grupo de operaciones especiales Delta de Santa Cruz, coronel Jorge Silva, informó que los efectivos de esa unidad buscan dar seguridad a los habitantes de Santa Matías.

El jefe policial aseguró que las investigaciones de ambos crímenes tienen un avance significativo y que el mismo será hecho conocer en las siguientes horas.

Al margen de ambos crímenes, entre el 19 y 22 de enero de este año, dos brasileños fueron acribillados en el departamento de Santa Cruz. El primero, Everton Cándido Gomes da Silva (34), fue asesinado en San Matías, mientras que el segundo, Marciel Ribeiro de Oliveira (35), perdió la vida en la capital cruceña. Ambas víctimas tenían antecedentes de narcotráfico, según informes policiales.

El 22 de marzo, Wilson Ledezma Rea (38) fue asesinado en el municipio de Minero, Santa Cruz. La víctima, que realizaba el cobro de una deuda, recibió disparos de arma de fuego de dos sicarios, que estaban a bordo de una motocicleta, en la que huyeron.

El 26 de abril una mujer fue asesinada en Ivirgarzama, en el trópico de Cochabamba. Recibió impactos de proyectiles de arma de fuego disparados por dos personas.

Un día después, el chileno Guillermo Mario Chinchón Pérez (46), recibió cuatro disparos de arma de fuego, por parte de un sicario, cuando subía a su vehículo en la ciudad de Cochabamba. El extranjero fue llevado a un hospital donde estaba en terapia intensiva. Era el segundo ataque armado que había sufrido por parte de una organización criminal.

Posteriormente, el 3 de junio, en un hombre de 46 años fue asesinado a tiros en Villa Tunari, cerca de una oficina estatal. La pareja de la víctima y uno de sus compadres debían dar el testimonio para identificar al autor del crimen.

El 21 del mismo mes, fueron acribillados los sargentos Eustaquio Alanes y Alfonso Chávez, además del voluntario del Gacip, David Candia en el municipio de porongo, departamento de Santa Cruz. Los móviles del hecho aún son investigados, pues se habría dado a raíz de un incidente con un grupo de personas.
A inicios de julio, fueron asesinados los cruceños Darwin Antelo Chávez, Alex Aguirre Lince y Carlos Callaú Rocha en el municipio de Ivirgarzama, trópico de Cochabamba, en medio de una acción relacionada con el tráfico de sustancias controladas.

El 20 de julio, Pedro Gómez, fue asesinado en Cobija, capital del departamento de Pando, cuando iba se pasajero en un taxi. Fue acribillado cerca de un cuartel militar, en la plaza del barrio Conavi. La Policía señaló que se trataría de un ajuste de cuentas.

Siete días después, en Santa Ana de Yacuma, departamento de Beni, perdió la vida Humberto Rea Arias, quien recibió el impacto de un proyectil de arma de fuego durante la serenata de la fiesta patronal de esa localidad beniana.

El 29 de julio, en la zona Ventilla de El Alto, fue asesinado el empresario José Omar Aguilera, quien se encontraba en el interior de su vehículo. Recibió tres impactos de bala.

BD/JJC