Camacho acusa a Murillo de presionar a perseguidos políticos y éste le dice “no grabo, no extorsiono”

Brújula Digital|02|02|20|

El presidenciable Luis Fernando Camacho se quejó el sábado a la presidenta Jeanine Añez que el ministro de Gobierno Arturo Murillo presiona a los perseguidos políticos por el MAS para evitar que apoyen su candidatura. La autoridad encargada de la seguridad del país le respondió que “jamás podría perseguir a nadie” y también le recordó que “yo no grabo, no extorsiono”.

“Señora presidenta, si muchos de los presentes han dicho eso, es porque asumen de que usted no debe estar al tanto de que su Gobierno, a través del ministro Murillo, presiona a nuestros presos y perseguidos políticos para que no apoyen a Camacho por sus juicios que tienen pendientes”, dijo Camacho, en la reunión de los cinco candidatos a la Presidencia, convocada por el Comité pro Santa Cruz.

Tras esta acusación, Murillo, no solo a través de un Twitter le respondió al exlíder cívico y desmintió las acusaciones. “Desmiento cobarde acusación, pido a Mario Cossio y a Manfred Reyes Villa digan si alguna vez se los presionó. No grabo, no extorsiono” (sic), escribió Murillo.

"No aceptó que me acusen, jamás podría perseguir a nadie", enfatizó el titular de Gobierno, notoriamente molesto por la acusación, y agregó que él no amenaza a amigos ni a enemigos.En la reunión, Murillo tomó la palabra y negó las acusaciones de Camacho, al aseverar que él sufrió persecución política durante los 14 años del gobierno del MAS, y que ahora no replicará esa actitud.

Cuando Murillo dijo que “no grabo, no extorsiono”, en su red social, lo hizo en referencia a Camacho, quien protagonizó una polémica por las grabaciones filtradas de reuniones con el excívico potosino Marco Pumari, su actual acompañante de fórmula.